Una bruja de magia negra y una chica lobo que ni siquiera cree en la magia, tras un intento de homicidio y un descarado secuestro, deciden aferrarse una a la otra, pese a que eso es igual que aventarse a un abismo.
Así, magia negra, magia blanca y m...
CAPÍTULO 40: LOS ÚLTIMOS GRANOS DE ARENA EN EL RELOJ.
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REINO BERMELOG, ZONA BOSCOSA.
28 DICIEMBRE 1437.
En medio de la travesía por el último tramo de bosque antes llegar a la aldea Fujiber, la vida le escupió encima a Iryen, recordándome que podías abandonar una fe pero esta no te dejaría ir fácilmente.
Nos emboscaron en la orilla del sendero principal, cerrándose frente a nosotros con su carreta, a plena luz del día.
Aparecí mi máscara y cubrí mi cara.
<<Justo tenían que aparecer, que inoportunos.>>
Me llegó la vibra que manaban sus artilugios sagrados, desde antes que todo el grupo bajase de su carreta tirada por dos caballos bien alimentados, fuertes, al igual que ellos, hombres de complexiones altas y fornidas, vestidos con túnicas negras, con detalles en rojo vino.
Pero los artilugios sagrados no fueron el problema.
Ahí, la novedad fue aquel polvo negro que regaron por el suelo en un parpadeo.
<<¿Cuándo lo fabricaron?>>
Antimagia.
Exorcistas usando antimagia en el campo de acción, mas no de manera ofensiva.
<<¿Para quién?>>
<<¿Para quién?>>
<<¿Para quién?>>
—¡Atrás! —Empujé a Iryen al darme cuenta de que mis hechizos no atravesarían esa defensa.
—¿¡Qué es eso!? —gritó ella.
—Antimagia —contesté y la cubrí con mi cuerpo. Una flecha impactó en dónde habría dado a la boca de mi estomago, si sí me hubiese tocado, pero la flecha cayó al suelo, humeando, la hierba bajo ella también humeó.
-¡MAGIA! —gritó el arquero.
<<Las flechas son normales.>>
—Aimniz, ¿qué... —Iryen se cubrió detrás de un árbol, jalándome del brazo izquierdo para que le siguiese—. ¿Enloqueciste? —Veía mi estomago sin parpadear.
—¡BRUJO! -bramó con furia el que tenía pinta de líder.
—¿¡VIERON SU MÁSCARA!?
<<¿A quién rayos buscan?, ¿A mí?, ¿A Medvedev?, ¿A...>> Sacudí mi cabeza. <<No importa a quién, si igual abren fuego contra nosotros.>>
Si bien me sorprendió su táctica de polvo de hierro con carga de antimagia, el objetivo era el mismo: Eliminarlos, a cualquier costo. Ya me habían visto, nos habían visto.