El destino de la reina (Jenlisa)

Capítulo 24

...

El niño tenía los ojos llorosos, no quería perder lo que había vivido el día anterior.

La reina lo miró y vio la tristeza en el pequeño. Lisa no dudó en inclinarse hasta su altura, colocando una mano sobre la cabeza del niño.

"Escúchame Ulric". El pequeño levantó su mirada. "Sé que las despedidas son difíciles, pero antes de irme quiero pedirte algo". Dijo con sabiduría.

"¿Q–qué es?" Preguntó.

"Espérame, espera a que tenga todo preparado para ti". El niño la miró sin comprender. "Cuando regrese te convertiré en el heredero de Axemor".

...

Lisa entró a su oficina encontrando al hombre sentado en una de las sillas a disposición en su oficina.

"Majestad" Calhoun se puso de pie brevemente en señal de respeto.

"Por favor, siéntate nuevamente". Mandó la reina. Lisa aprovechó para acomodarse en su lugar detrás del escritorio.

"Tan inmaculada como siempre su majestad".

"Y tú tan desaliñado como siempre". Respondió la reina, Calhoun río.

"Mi apariencia es resultado de mi duro trabajo". El hombre levantó un portafolio del suelo. "Además, en estos tiempos a las mujeres les gustan un poco —desaliñados". Dijo en un susurro como si fuera un secreto a voces.

Lisa giró los ojos, estaba muy acostumbrada al inconexo personaje que era su abogado.

"¿Dónde está Holsen?"

"Está en camino su majestad, quise adelantarme para compartir mis descubrimientos". Lisa asintió.

El hombre era apuesto, pero tenía una debilidad por la vida fácil, por lo que le fue muy difícil conseguir clientes al principio. Holsen se lo había presentado, el primer día el hombre había sido vestido de forma inmaculada, pero al pasar por delante de él pudo percibir el leve hedor del alcohol. Lisa en verdad dudó en contratarlo, se veía joven y un completo inexperto. La mayoría de los trabajadores que la respaldaban fueron contratados por su padre. Calhoun fue su primera prueba como empleadora. En ese momento el hombre vio la duda en la reina, por lo que no dudó en pedirle tiempo de prueba, ella aceptó y los frutos fueron rápidamente cosechados. Lisa quedó gratamente sorprendida, el joven más que un abogado era materia de espía.

"Escuche muy tarde sobre su inesperado viaje, su majestad, antes de eso le envié una carta explicándole un poco sobre lo que descubrí" Empezó. Lisa vio la carta posada sobre su escritorio, esperando a ser leída. "Estuve esperando su pronta respuesta; pero como esta no llegó decidí aprovechar esta reunión".

"Hubo asuntos más importantes". La reina no había tenido tiempo suficiente para abordar el tema de la condesa debido al asunto de corrupción en el que estaba enfocada. Al llegar a Waimor lo primero que hizo fue iniciar una investigación a los funcionarios públicos de Peasant.

"Oh, Holsen me mencionó la situación de Peasant".

"Una verdadera lástima, mi padre estaría decepcionado del nido de ratas que se convirtió su querida ciudad". Dijo la reina.

"Si gusta puedo encargarme de la investigación de Peasant". Ofreció el hombre, colocó el portafolio sobre la mesa. "Son los informes que le envía Mr. Collier sobre los movimientos y negocios de la compañía en los últimos años. Cada uno tiene su fecha, me tomé el tiempo de revisarlos majestad y todo es conforme". Calhoun intentó acomodar mejor su ascot.

"Voy a revisarlo más tarde". Lisa abrió el portafolio y vio algunas manchas sobre los papeles.

"Si me disculpa, he de decir que derramé un poco de café sobre algunas hojas, un simple descuido". Lisa cerró el portafolio, llevándolo a uno de los cajones. Evitó hacer algún comentario, pues estaba acostumbrada a las maneras de Calhoun.