Capítulo 8

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Dos semanas después de lo sucedido, todo había vuelto a la relativa normalidad. Los chicos iban a la escuela, Lydia se había acercado más a Theo. Stiles y Malia seguían sin disculparse, y sin querer a la quimera cerca. Scott era más bien neutral, teniendo en cuenta que la quimera era el ancla de su beta y viceversa, cosa que le hizo saber Mason.

Entonces, como las aguas estaban relativamente calmadas, Peter decidió darle la sorpresa a su sobrino y tener una pequeña charla del futuro.

- Der – lo llamó Peter cuando terminó de desayunar – ¿Vamos a correr?

- Claro

- ¿Les molesta si voy? – preguntó Isaac, Peter miró a Liam y Theo

- Issy, yo necesito que me ayudes en algo – pidió la quimera

- Oh, claro

- No te preocupes Isaac, mañana saldremos de nuevo – sonrió el Hale mayor y después se fueron, el beta y la quimera sonrieron

- ¿Por qué sonríen? – preguntó Stiles cuando los Hale se fueron

- Peter hizo reconstruir la mansión – respondió Theo cuando escuchó a los lobos lo suficientemente lejos

- Y ha estado muy ansioso por mostrársela a Derek – agregó Liam

- Entonces no necesitas mi ayuda para nada – se quejó el rubio

- Lo siento, pero Peter estaba realmente emocionado por esto, lleva semanas enloquecido

- Espero que lo grabe – rogó Stiles

Cuando ambos Hale estaban llegando en su forma de lobo a las "ruinas" de la mansión, Peter se transformó en humano y detuvo a Derek, este entonces también volvió a su forma humana.

- ¿Pasó algo?

- Primero, toma – le dio ropa – Ahora, cierra los ojos

- Peter

- ¿Confías en mí?

- Si

- Entonces, cierra los ojos

Peter lo llevó lentamente a donde estaba la restaurada mansión y lo hizo abrir los ojos, el ojiverde, cuando observó la mansión, se quedó mudo y de sus ojos comenzaron a salir lágrimas, se volteó y abrazó a su tío con todas sus fuerzas.

- Gracias Pet

- De nada Der, bienvenido a casa. No es como la original e hice unas cuantas reformas, pero...

- No importa que no sea igual, eso la hace un poco más especial – Peter sonrió

- Ahora la manada podrá quedarse en la nueva mansión Hale, y por cierto hay que traer de nuevo a los Hale aquí

- Solo somos cinco

- De eso quería hablarte – Derek lo miró – No sé si estés de acuerdo, pero Theo, él

- Es todo un Hale ¿verdad? – el mayor asintió - ¿Quieres darle el apellido?

- No solo eso – suspiró – Quiero adoptarlo

- Sabía que esto sucedería

- ¿No estás de acuerdo?

- Claro que lo estoy Pet, él ha pasado por tanto, tanto como nosotros. Quizás no sea un Hale de sangre, pero si lo es de corazón – Peter sonrió – No es un Hale de sangre ¿verdad?

Como un HaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora