two rings and a couple of idiots

Chapter 4: Awkward

Esta fue una intervención. Era la única forma en que Natasha podía describir lo que estaba sucediendo en ese momento. Después de que Daredevil dejó la Torre, Steve llamó a todo el equipo a la sala común. Ella ya podía adivinar de qué se trataría la conversación. Todos estaban en las cámaras cuando Daredevil volvió en sí y todos vieron su reacción al despertar sin sus anillos. Tony planeó burlarse de él, por supuesto, porque "quién hubiera pensado que el Diablo era un hombre de familia", pero el cambio en su comportamiento fue instantáneo cuando el justiciero desvió su oferta de llamar a alguien. Ella conocía a su equipo y sabía que a todos les encantaba especular, con Tony Stark justo al frente.

—¡Tiene sentido!—, argumentó Tony después de que Steve le dijera por segunda vez que no sacara conclusiones apresuradas. —Es obvio que perdió a su compañera. Por eso también puede pasar tiempo con Castle, se identifican entre sí. Y por eso es tan gruñón todo el tiempo—.

A pesar de que los demás en su mayoría lo ignoraron y a pesar de que Steve les dijo que no especularan y, lo más importante, que no sacaran conclusiones apresuradas, sus interacciones con Daredevil fueron obviamente más... incómodas... ahora, sí, esa fue una buena manera de describirlo.

Los menos sutiles al respecto fueron Tony y Clint, lo cual era de esperar, ellos arrasarían el mundo hasta los cimientos para llegar a los que tocaron un solo pelo de las cabezas de Pepper y Laura. Ambos eran algo más amables con Daredevil ahora, y él podía decir que el justiciero estaba extraño por eso. Stark no tenía en la sangre el compartir su afecto de otra manera que no fuera con bromas y regalos caros, y Clint era esencialmente el mejor hermano del Diablo a estas alturas, por lo que la ley de mejores amigos requería que fueran malos el uno con el otro. Nat lo sabría, había tenido que lidiar con ser la mejor amiga de Clint durante años.

No importaba lo que dijera, Steve también se comportaba de manera ligeramente diferente, lo que se filtraba a Bucky y Sam, incluso si con Sam era menos obvio porque era amable con todos (excepto con Bucky, pero tenían privilegios de novios). Después de la quinta vez que Cap le preguntó a Daredevil si quería unirse a ellos en la torre después de la misión como si estuviera hablando con una de sus víctimas traumatizadas y el otro a su vez se negó con un ceño fruncido más molesto de lo habitual, Natasha decidió llegar al fondo de esto, aunque solo fuera para ahorrarle a Daredevil la tortura de que el propio Capitán América le hablara como a un niño. El Diablo parecía a un suspiro de distancia de golpearlos a todos. Nat podía simpatizar.

Su comportamiento molestaba al Diablo. Sabían que estaba entrenado y si su entrenamiento era parecido al que ella tuvo que soportar para llegar a ser tan buena, ella sabía exactamente por qué.

Daredevil tenía la impresión de que ahora el equipo lo consideraba débil.

Ella lo vio en la forma en que él rechazó la ayuda con más agresividad que de costumbre, en la forma en que ocultó sus heridas con más insistencia que de costumbre. Estaban deshaciendo cualquier progreso que habían logrado para que Daredevil no los odiara.

Por su parte, Natasha no se creyó la teoría de la pareja perdida. Aprendió a confiar en su instinto y este le decía que era una tontería. Decidió tomar el camino fácil esta vez en lugar de la forma habitual de espiar y simplemente preguntarle a Daredevil. Así que lo localizó.

—Lo que sea que le haya pasado a tu equipo, deberías decirles que se detengan antes de que los golpee a todos, al diablo con las armaduras de acero y los escudos de vibranium —le gritó Daredevil desde donde estaba encaramado en el borde del edificio. Uno de estos días, ella descubrirá cómo él siempre sabe dónde está. Nat era una de las mejores espías que el mundo tenía para ofrecer y se enorgullecía de poder acercarse sigilosamente a cualquiera. Honestamente, se había convertido en una especie de juego en este punto y ambos estaban involucrados en él.