31. Me gusta su azul

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Capítulo 31

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Capítulo 31

Me gusta su azul

MINHO

Minho no tenía un solo recuerdo antes de ese día en el que hubiera estado separado de Jisung durante tanto tiempo. Lo máximo había sido cuando uno entraba a consultas con el dentista o a revisiones médicas generales. Siempre sabían dónde estaba el otro y se habían acostumbrado a acompañarse en todo momento.

Creyó que la primera noche sin Jisung la pasaría en vela, que el impulso de caminar los quince metros que los separaban sería tal que no duraría ni dos horas antes de encontrarse tocando la puerta de la que era su habitación.

Para cuando él llegó al colegio, Jisung había sacado casi toda su ropa del dormitorio, y para que ese hecho no le carcomiera la cabeza planeó esconderse en la biblioteca.

Debió suponer que Jisung no se quedaría de brazos cruzados, no era del tipo que se queda tranquilo ni que se rendía fácilmente. Jisung era todo lo contrario a él, y todo lo contrario a lo que él buscaría en una pareja, y por eso estaba enamorado de ese ser tonto, insensible, manipulador y vengativo.

Salió temprano de su habitación y planeó encontrarse con Taehyung y Jungkook en la cafetería, la pareja recién comprometida era como un faro encendido ese día, todos hablaban de la transmisión y los videos filtrados del evento celebrado en la mansión de los Jeon.

Nadie sospechaba que no fue más que una trampa para Jeon Yeji; una que tanto él como Jisung ayudaron a tender. Ahora solo quedaba esperar por la reacción de la mujer, lo que esta diría y haría a continuación. Taehyung no era santo de la devoción de su suegra, eso era bien sabido, Yeji se había esforzado en mantener a su hijo separado de los Kim en los últimos tres años. Sin embargo, el momento en que Jungkook y Taehyung volvieran a estar juntos era una eventualidad inevitable.

Bastaba con permanecer junto a ellos un par de segundos para saber que estaban locos el uno por el otro.

Jungkook tenía un brillo diferente en su rostro y la tensión con la que siempre parecía encontrarse su cuerpo, se esfumaba si Taehyung estaba cerca.

El caso del grandulón con personalidad de oso de peluche no era diferente, se volvía diez veces más atento y amable si Jungkook estaba cerca.

Entró a la cafetería. Podía aplazar los nervios de ver a Jisung hasta después de clases, a Jisung no le gustaba desayunar, despertaba siempre sin hambre y prefería esperar al almuerzo y tomar colaciones entre las comidas.

Era temprano por la mañana, ya se había acostumbrado a que los chicos en Crown Élite preferían dormir más antes que bajar a desayunar. Taehyung esperaba sentado frente a una de las mesas junto al ventanal con vista al jardín principal del colegio.

— ¿Dónde está Jungkook? —preguntó para captar la atención del azabache.

La mirada de Taehyung se levantó hasta que el par de ojos azules que cargaba se achicaron debido a la sonrisa que se formó en su rostro.

Sangre Pura | KTH&JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora