Flufftober KazuRei "2024" (Buddy Daddies)

Caricias En El Pelo

El día comenzó pero la pareja continuaba acostada hasta que el mas joven empezó a abrir los ojos <<sigue durmiendo, eso es tan raro por que mayorme soy yo quien se queda dormido por más tiempo>> se escuchaba por su mente del mas bajo mientras miraba a su pareja, se sentó apoyando la espalda en la cabecera de la cama y empezó a acariciar el cabello de su novio <<es tan suave, con razón él siempre me acaricia así, su cabello es tan claro>> pasaba por su mente del pelinegro mientras continuaba acariciando la cabellera del mas alto quién empezó a despertar, la verdad le pareció demasiado agradable y preciosa escena de tener a su pareja tratándolo con esa delicadeza mientras dormía lo que provocó una sonrisa -buenos días amor- saludó el hombre rubio obteniendo un sobresalto de su pareja ruborizada al ser atrapado haciendole caricias -eh.. Bue.. Buenos dias cariño- dijo con cierto tartamudeo el pelinegro que intervino antes de cualquier mención -dormiste mucho, creo que anoche bebiste demasiado amor- al terminar de hablar el chico de ojos zafiro la cara del contrario empezó a ruborizarse al recordar lo meloso y mano larga que se había comportado tan solo hace horas atrás -eh.. Si, creo que no debo beber mucho, perdón si me porte mal contigo amor- se disculpaba el mayor obteniendo una negativa con la cabeza de su novio -no hace falta, no hiciste nada malo, de hecho eres lindo, eres un extraño ebrio tierno jajaja- bromeó con una ligera verdad mientras el mas alto se quejaba -oye, pero ¿porqué, dices es?- dijo el mayor con una expresión mas calmada y empezo a hacerle cosquillas a su pareja -oye ¡detente! Jajaja- pedía el manor mientras empezaban a tener una especia de guerra de cosquillas sobre la cama.

La puerta sonó y se escuchó una voz -buenos días, servicio a la habitación- del empleado de servicio del hotel -un momento- dijo el mayo levantándose para dirigirse a la puerta y dejar entrar al servicio quien nuevamente supuso algunas cosas -que bueno que disfruten de nuestro hotel, luego recogeré la comida- lo decia con una picardia que dejaba a Kazuki apenado aunque realmente nada de ese tipo de íntimidad habia pasado, agradeció por el servicio y se sentó en la cama para junto a su pareja empezar a desayunar -los desayunos en serio son buenos aquí- decia el mas joven disfrutando su desayuno.

Habían terminado de desayunar y se recostaron un momento en la cama -bueno hoy es el última día, debemos tomar el vuelo por la noche así que deberíamos ordenar las cosas y luego disfrutar lo que hay aquí como la piscina de afuera ¿te parece bien?- dijo el mayor mirando a su pareja dando una caricia sobre su cabello -si amor, hagamos eso- respondió el mas bajo sentándose en la cama y empezó a ordenar algunas cosas lo cual sorprendió al mayor gratamente que siguió los pasos de su pareja para apresurar el resultado, en un buen tiempo acomodaron sus pertenencias dejando las maletas listas para recogerlas dejando lo importante en el bolso de mano y salieron a la piscina -me gusta, aquí hay tobogán de agua y esta vacío- dijo con emoción el mas joven entrando al agua con un clavado bien ejecutado seguido salió para utilizar el tobogan -¡Rei, ten cuidado!- dijo con preocupación el mayor mientras acomodaba un par de toallas en las bancas reclinables a la orilla de la piscina -¡amor ven!- dijo el mas joven cayendo a la piscina y salpicando agua a su pareja -¡ahí voy!- dijo haciendo una "bala de cañón" entrando al agua mojando más a su pareja -amor no me mojes- dijo fingiendo molestia antes de tomar un puñado de agua y lo avento como un chorro -¡ah! Rei.. Me toca- respondió el mayor haciendo lo mismo con las manos y empezaron a jugar con el agua entre frases ingeniosas y risas hasta que el mas alto lo tomó por detrás aprisionandolo -¿que haces? Amor dejame ir- decia el pelinegro entre juegos hasta que se giró mirando de frente a su pareja -eres demasiado lindo ¿sabes?- dijo el hombre rubio acercándose a los labios de su pareja quién correspondió, el beso es bastante romántico mientras se mantenian en un abrazo cerca de la orilla de la piscina mientras sus cuerpos estaban mojados, continuaron por unos minutos envueltos en ese ambiente cursi e íntimo hasta que Kazuki fué quien interrumpió el beso -amor, vamos a cambiarnos ya casi es hora de nuestro vuelo- dijo el mayor dandole una caricia en el cabello de su pareja antes tomarlo de la cintura y ayudarle a subir a la orilla y luego el salió también.

La pareja se empezaba a secar el cuerpo después de darse una ducha rápida, tomaron sus cosas y regresaron a su habitación de hotel para arreglarse la ropa que traían puesto para el viaje, pidieron una última comida en el hotel para degustar juntos y al terminar su tiempo de hospedaje tomaron sus maletas y se fueron de la mano a esperar un taxi que los lleve hasta el aeropuerto que curiosamente era el mismo chófer de la noche anterior -veo que con o sin alcohol son una pareja muy cariñosa- inició la conversación el taxista -¿usted fue quien...? Ay que vergüenza- dijo en voz alta el mas alto -no se preocupe, me parecen una pareja muy dulce- dijo con una sinceridad el conductor hasta qie legaron a su destino con una plática amena entre ese par. La pareja luego de entrar al aeropuerto esperaban su turno para abordar el avión cadda uno miraba su celular por un momento en lo que avanzaba la fila, mostraron sus documentos y entraron sin problemas acomodandose en la aeronave, el mas joven quedó serca de la ventana y el mayor a su lado, siguieron las instrucciones de despego hasta que el avión ya se encontraba en el cielo -amor, mi padre me mando un mensaje- dijo el mas joven mirando a su novio con un semblante serio -¿Qué sucede amor? ¿Qué te dijo?- preguntó con preocupación el mayor -mi padre quiere conocerte, sabe que te mudaste conmigo y me mandó una foto de nosotros besándonos así que no pude mentirle- dijo con cierta tristeza el mas joven agachando la cabeza, su pareja acarició su cabello suavemente e intentó animar -esta bien amor, en algún momento tenía que presentarme a él... Sobretodo sinquiero estar contigo el resto de mi vida- dijo el hombre rubio antes de darle un beso en su frente y abrazarlo -amor, sabe que viajamos y nos invitó a casa después de nuestro regreso, yo no dejaré que te diga nada malo- dijo con decisión y seriedad mirando a los ojos de su novio quién le sonrió -dare lo mejor de mi para que me acepte, ya lo verás- dijo calmandona su pareja y siguieron el viaje semi abrazados tomandose de la mano por un tiempo.