Más Intenso Que La Cafeína - Eremin

Capítulo 16

Desde que hicieron las cosas oficiales en la cafetería, Armin y Eren se habían vuelto prácticamente inseparables. Cuando no estaban juntos, se enviaban mensajes de texto. No habían tenido mucho tiempo para tener una cita de verdad desde entonces, pero la mayoría de las veces Eren se presentaba en casa de Armin para llevarle al trabajo y le esperaba para llevarle a casa cuando terminaba. Excepto que rara vez iban directos a casa; la mayoría de las veces, Eren convertía sus trayectos en mini citas, ya que paraban "sólo para tomar unos batidos muy rápido" o "vamos a la librería a echar un vistazo" o incluso una vez "necesito que me ayudes a rellenar esta solicitud de trabajo y como conoces a todo el mundo aquí quizá les caiga mejor". (Bueno, puede que esto último fuera menos que una cita, pero aun así a Armin le encantaba cada momento que pasaba cerca de Eren).

El abuelo de Armin estaba encantado de tener a Eren de vuelta en la ciudad. El primer día que recogió a Armin para ir a trabajar, obligó a Eren a prometerle que pronto cenarían juntos. Cuando sus agendas coincidieron después de un par de semanas, por fin pudieron fijar una fecha. A pesar de las protestas de Armin, su abuelo se puso manos a la obra, preparó una comida enorme y sacó la vajilla. "¡Abuelo no hagas tanto escándalo por él, que lo vas a espantar!". gimió Armin. Su abuelo se rió como respuesta. "Armin, últimamente estás muy contento. Sólo te he visto así antes, y fue la última vez que Eren y tú corrían por toda la ciudad". Armin sonrió ante eso.

"Soy feliz", respondió, dándole un abrazo. "Me gusta mucho, abuelo".

"Ya, pues si tanto te gusta, será mejor que vayas a ponerte algo más bonito, porque se supone que llegará en diez minutos", le respondió guiñándole un ojo. Armin miró el reloj y jadeó antes de salir corriendo por el pasillo, cerrando la puerta de su habitación tras de sí.

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"...¡y cuando llegué a casa me encontré a Marco y a él en calzoncillos en medio del salón! Así que, naturalmente, ¿qué se suponía que tenía que pensar al ver a Armin y a su 'amigo íntimo' así después de haberse quedado solo en casa?".

Armin golpeó la frente contra la mesa con un gemido. Desde que había terminado la cena, había sido un no parar de historias embarazosas, con su abuelo sintiendo la necesidad de "poner al día a Eren de todo lo que se había perdido."

Todavía riéndose de la historia, Eren se volvió hacia él y le dio una suave patada por debajo de la mesa. "Así que Marco y tú, ¿eh?", se burló.

"En realidad no fue así en absoluto", contestó Armin fulminando con la mirada a su abuelo. "Marco prácticamente se había cubierto de pintura roja, así que le dejé usar la ducha y luego no tenía ropa, así que llevé la suya a la lavadora, pero entonces la pintura se esparció por toda MI ropa... y luego había una araña...", se interrumpió al ver que Eren le observaba con un brillo divertido en los ojos. "Sabes que no importa. Definitivamente, nada. Esa vez, al menos", añadió la última parte en voz baja, pero Eren aún lo oyó y enarcó una ceja. Le lanzó una mirada que decía "oh, quiero oír todo eso más tarde" y Armin respondió con una patada en la espinilla de Eren por debajo de la mesa y su propia mirada avergonzada que decía "cierra la puta boca, Yeager".

"En fin... creo que ya he avergonzado bastante a Armin por una noche. ¿Qué hay de ti, Eren? ¿Qué has estado haciendo desde que te fuiste? Han sido 8 años que nos hemos perdido, quiero escucharlo todo" preguntó su abuelo.

Eren se aquietó un poco ante la pregunta. "Oh, bueno, esto y aquello. Ya sabes, terminar el instituto de alguna manera", contestó.

"Sentí mucho lo de tu madre. Sé que debe haber sido duro para ustedes dos. ¿Cómo está tu padre?"

"Está... por ahí. No se lo tomó bien. Pero en realidad no hablamos... sí. En fin, está claro que las cosas se han arreglado desde que estoy aquí de vuelta, ¿no?", contestó Eren, con una falsa sonrisa pegada al final.