Capítulo 4

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Narrador omnisciente

Rebecca

Becca temía perder el control en el departamento de marketing esa era su gran verdad, se moría de miedo por tener que perder la libertad de crear y diseñar como solía hacerlo en común acuerdo con James, si delegaba a alguien más ese cargo se complicaría todo para ella.

Sus padres siempre que percibieron las frustraciones de Rebecca le decían unas palabras "las cosas toman el control por si solas, no somos los dueños del mundo, no podemos controlar siempre lo que pasa a nuestro alrededor" cosa que para Becca siempre fue muy difícil de entender porque ella trataba siempre de mantener el control de todo en su entorno.

No podía seguir postergando lo inevitable, pero tomó una decisión, ella debía apersonarse de la situación ella misma sería quien escogiera los mejores currículums y entrevistara a los que se postularán para el puesto muy difícil de ocupar según ella, su equipo de trabajo todos aunque lamentaban la muerte de James, sabían claramente que había una vacante libre, los interesados no demoraron en postularse directamente en RRHH.

3 Semanas después de la muerte de James.

El invierno azotaba la ciudad de Londres y el penthouse de Rebecca, ella se encontraba en su oficina o estudio como ella lo llamaba como era de costumbre perdida en su propio mundo, era Diciembre inicio de mes y a unos días de su cumpleaños 25.

Pero a Becca era lo que menos le importaba, lo único que quería era volver a la empresa y llenarse de mucho trabajo pues tenía otras preocupaciones o por lo menos para mantener su cabeza en orden y ocuparse mucho, sentía que se estaba volviendo loca en su penthouse.

Estaba sentada en su escritorio muy concentrada cuando una videollamada entró a su MacBook era su asistente Caleb y su entrecejo se frunció pues Caleb no solía llamarla a esas horas al menos que fuera muy urgente o una emergencia, no se alarmó pero contestó de inmediato.

- Supongo que debo volver- habló Becca en cuánto contesto la llamada, no levantó la mirada a Caleb miraba su iPad y jugaba con su lápiz en ella suponiendo que a eso se debía la llamada de su asistente. Caleb ya acostumbrado al hermetismo de su jefa fue al grano.

- Tiene razón señora, acabo de hablar con su padre, su madre no está de acuerdo pero tuve que decirle la verdad y expresar mis más sinceros deseos de que usted señora retome su puesto ya que la empresa es una total locura sin su cabeza al mando- dijo Caleb lo más formal posible pues eso era todo lo que Rebecca Armstrong desprendía y esperando impaciente una respuesta de su jefa.

- Nos vemos mañana a primera hora señor Grey- le respondió Becca aún sin mirarlo bajando la pantalla portátil sin esperar una respuesta de su asistente y siguió con lo que hacía.

Caleb del otro lado soltó suspiro de alivio, también bajó la pantalla portátil y se puso a trabajar para tener la agenda de su jefa al día y minuciosamente detallada como a ella le gustaba.

Becca en cambio seguía en lo suyo pero pensando en que por fin volverá a la empresa a trabajar lo malo de esto para ella era la vacante libre, ya no podía esperar más debía manejar la situación como mejor pudiera.

Pero sobre todo controlarse para no encontrarle un 'pero' a cada postulante, a ella no la habían criado de esa forma, ella debía escoger a la persona que ante sus ojos fuera el mejor sin desmeritar a nadie.

Salió de su estudio a su habitación para poder descansar, mañana sería un día complicado y debía dormir por lo menos todo lo que pudiera antes de poder empezar su día.

Algunos rayos de sol que se perdían entre sus persianas la hicieron abrir los ojos antes de que su alarma sonara, aprovechó y se levantó para ducharse y hacer su respectivo aseo se vistió con ropa deportiva algo abrigada y fue directo al ascensor.

Mientras Becca bajaba se acomodaba sus infaltables Airpods y escogía la lista de reproducción en su celular, saludó como siempre formal al portero de su edificio y este la saludo de igual forma.

Sus padres eran dueños del edificio y todos sabían que su heredera vivía en el penthouse, pero como de costumbre con las personas que resultaban desconocidas para ella, Becca era igual de formal.

Cuando volvió a su lugar, tomó otra ducha con toda la paciencia del mundo como si fuera un ritual, cuando salió se puso su bata, mirando al espejo secó su cabello para luego peinarlo, se vistió como ya era un hábito en ella con ropa interior de alguna marca reconocida.

Para luego ponerse un traje de dos piezas hecho a la medida color gris, aplicó un maquillaje suave, se puso unos tacones no tan altos, tomó un bolso de mano a juego y como el clima lo ameritaba un abrigo negro por encima.

Bajó al estacionamiento subterráneo del edificio y subió a su Audi RS7 Sportback color negro y emprendió su camino a la empresa Becca amaba los autos alemanes, llegó e ingreso al estacionamiento.

Subió por el ascensor privado, para evitar cruzarse a alguien que le quisiera dar sus condolencias y se dirigió al último piso 'presidencia' donde estaba su oficina, una que era para sus padres y las de otros directivos más.

En cuánto salió del ascensor divisó a Caleb que la esperaba de pie afuera de su oficina con su iPad abrazado a su pecho y con nerviosismo evidente como siempre también vio una que otra secretaria con café en mano.

Camino directo a su oficina y en el momento en que quedó a un lado de Caleb sin poner su mirada en él saludó.

- Buenos días señor Grey- habló siguiendo de largo abriendo la puerta de su oficina para entrar, dejó su abrigo y su bolso en el perchero.

- Buen día señora- contestó Caleb mientras la seguía con la mirada y dando pasos detras de ella hasta que la vio sentarse en la silla de su escritorio. Rebecca le hizo un ademán con la mano para que este se sentara en la silla de enfrente.

- Por favor dígame qué me tiene buenas noticias- dijo Becca mientras se recostaba en su silla y medio la giraba para ver por su gran ventanal hacia la ciudad, extrañaba el lugar.

- Por supuesto señora, he revisado lo que me pidió y descarté minuciosamente a las personas que no cumplen con el perfíl que usted requiere y ya tengo la lista y currículums de los candidatos que entrevistará que no trabajan en la empresa- contestó Caleb luego de darse valor carraspeando su garganta y bajando la mirada a su iPad.

- También tengo la lista y los currículums que me facilitó recursos humanos de los compañeros que se postularon para el cargo, de estos no descarté ninguno como lo pidió- siguió hablando Caleb mientras maniobraba su iPad - Justo le acabo de enviar toda la información a su correo electrónico señora- levantó la mirada Caleb y vio a su jefa que se volteaba para abrir la MacBook.

- Muy bien señor Grey, le echaré un vistazo- le respondió Becca suspicaz mientras abría su correo corporativo, de inmediato levantó la mirada para encontrarse con la de Caleb - ¿Que me dice del otro asunto?- le preguntó Becca

- Ayer también hablé con sus padres sobre eso señora, ninguno de los dos puede hacerse cargo tienen sus agendas copadas, incluso me comuniqué con la Srta Samanun y no hay manera por ahora, lo siento señora- respondió Caleb tratando de mantenerle la mirada a su jefa y que no se notara su transpiración.

- Entiendo señor Grey, de modo que tengo poco para encargarme de ese asunto. ¿Podría decirme cuánto tiempo me queda?- habló Becca girando otra vez su silla y volviendo a mirar su ventanal, tratando de analizar lo dicho por su asistente.

- Me temo que no le queda mucho tiempo señora- habló Caleb volviendo a respirar normal y volviendo su vista al iPad, volvió a hablar - 14 días para ser exacto según lo que hablé la ultima vez con el señor Heng ¿Quiere que programe otra videoconferencia señora?- preguntó Caleb

- Yo hablaré con el de ser necesario, hoy estaré todo el dia en la oficina ya sabe el protocolo puede retirarse señor Grey, gracias- pidió Becca con su mirada aún en la ciudad pensando en todo lo que debía empezar a hacer.

- Cómo ordene señora- se levantó Caleb de la silla para salir, cerrando la puerta tras el y dirigirse a su escritorio mientras pedía al cielo y deseaba que nadie interfiera en el protocolo de su jefa.




I'm only me when I'm with youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora