Capítulo 27

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Narrador omnisciente

~^~ Wonderwall ~^~

Ambas estaban ansiosas, Rebecca tuvo que ocuparse mucho para no presentarse antes en la puerta de Freen, decidió llamar al jefe de construcción de su nueva casa para ponerse al día con las novedades.

Freen estaba concentrada en preparar y tener todo perfecto para cuando llegara su invitada, quien no tenía idea de que la cita sería allí, eso la hacía sonreír, sabía que Becca no se espera nada de lo que va a encontrar.

La espera terminó, exactamente a las 20h Rebecca tocaba el timbre del apartamento de Freen, aunque para ella saldrían debía ir por su chica hasta la puerta y bajar con ella, era lo correcto para Becca; Sarocha corrió a abrir, ninguna mandó algún msj a la otra.

La pelinegra sabía que era Becca la que estaba del otro lado de su puerta y casi trastabilla en sus tacones cuando la vio, siempre estaba hermosa, pero cuando no usaba un traje formal se quedaba muda, de repente sintió mas calor del que ya había por la calefacción.

Y Rebecca estaba igual o peor al ver el vestido corto y ajustado que llevaba Freen, que no dejaba casi nada a la imaginación de ella que ya se sentía conocedora de ese cuerpo a memoria, bajó la mirada a las piernas largas y firmes de su chica y solo pudo pensar en tenerlas alrededor de su cuello.

- ¿Te quedarás ahí mirándome así?- preguntó Freen para jugar un poco con su castaña que le miraba las piernas.

- ¿Que? No, claro que no- respondió luego de subir la mirada a los ojos cafés y trago saliva. - Estás hermosa- se acercó a darle un beso en la mejilla a Freen. - ¿Nos vamos?- susurró en su oreja, se separó y le ofreció la mano para irse rápido de allí.

- Beck, yo preparé la cena- dijo para jalarla hacia dentro y cerrar la puerta, la llevó a su cocina. - ¿Que te parece?- preguntó insegura, cosa rara en Freen, pero con Beck le pasaba seguido.

Sarocha preparó ravioles, sabía que a Rebecca le gustaba todo tipo de pastas por todas las comidas que habían compartido en la empresa, acomodó todo perfectamente en la encimera de su cocina, velas, copas, platos, servilletas y se podía ver el recipiente con la comida que había sacado del horno minutos antes de que llegara Beck.

- Es perfecto- se giró luego de dar una repasada a todo lo que había preparado su chica, para luego mirarla con una sonrisa enorme. - Me encanta- halagó para rodear a Freen por la cintura y darle un beso en la comisura de sus labios.

Nunca alguien había hecho algo así para ella, aparte de su madre y Mhe, siempre fue práctica las veces que salió con alguien, restaurante y luego un hotel o su penthouse, desde que conoció a Freen supo que merecía muchísimo más que eso y aunque no creyera en aquello, su corazón y su tailandesa la hicieron cambiar de idea, había encontrado a su persona especial.

Freen le hizo una señal a Rebecca para que se sentara, fue en busca de una botella de vino que tenía enfriando, se la mostró a Beck, ésta le sonrió y asintió aprobando, se acercó, la castaña la esperaba aún de pie, ésta le pidió la botella y el saca corchos, los dejo en la encimera y le sacó una de las sillas altas a Freen para que se sentara.

Después Becca la imitó y se dispuso a abrir la botella y servir vino en las copas mientras veía de reojo a su pelinegra que servía en los platos la cena, Rebecca agradeció y levantó su copa para brindar con su chica quien aceptó con una sonrisa y comenzaron a comer.

Cenando hablaron de su día de trabajo, cosa que ya hacían desde antes de su viaje y estaban cómodas con ello; Becca se ofreció para lavar todo lo que usaron pero Freen no la dejó, esa batalla la ganó la pelinegra, le explicó que solo tenía que dejar todo en el lavavajillas y volvería con ella.

I'm only me when I'm with youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora