Terminé en la película que me aburrió (Brahms y Tu)

Cap. 3: Prométanme que volverán

Narra ___________(t/n)

al llegar a la casa, vi a la Señora Heelshire, con una dulce sonrisa hacía mi le entrega el muñeco a su marido. Mientras con una actitud demandante guiaba hacía otro lado de la casa a Greta, quien parecía seria y no disfrutar de la situación.

Mire sutilmente al muñeco, dándome cuenta de la mirada fija del Señor Heelshire.

—Tómalo—Me lo entrego, yo negué con mis manos.

—No creo que sea buena idea, no se cargar niños—Dije nerviosa, no quería cargar con esa cosa tan extraña, el Señor Heelshire se rio de mi, y me lo puso en brazos

—eso es—Dijo satisfecho, viéndome como tenía a Brahms el muñeco, en brazos.

Con una postura rígida, deje que el Señor Heelshire acomodara mis brazos para sostener al muñeco, este descansaba su cabeza en mi hombro, casi como si lo hiciera a propósito.

—Le agradas—Contesto y yo me asuste.

"No sé si es bueno o malo"

Pensé, sabiendo que el real estaría en cualquier parte de las paredes y no tenia forma de comprobar si era verdad lo que este hombre decía o no. Lo seguí hasta la cocina, en donde observe a la Señora Heelshire y a Greta, esta ultima me miro con asombro, mientras mi rostro solo gritaba ayuda y que alguien me lo quite, aunque parecía que solo Greta se daba cuenta de esto, porque los Señores Heelshire me miraban con una gran sonrisa de satisfacción.

La Señora Heelshire tomó al muñeco en sus brazos, quitándomelo, yo suspire aliviada y el Señor Heelshire se rio de mi.

"Debe ser de familia hacer bromas"

Pensé un tanto molesta, mientras Greta ahora era llevada al patio de la casa por el Señor Heelshire a mirar las trampas. Por poco suspiro de alivio, hasta que volteo y me encuentro con la fija mirada de la Señora Heelshire frente a mi, aun sosteniendo el muñeco.

—Es la primera vez que alguien reacciona diferente a mis expectativas respecto a Brahms—Dice ella, yo solo sonrió tratando de ser comprensiva.

—Brahms es un lindo chico—Comento, la anciana parece conmovida.

—¿Oíste eso Brahmsy? Esta chica piensa que eres lindo—Habla al muñeco como si se burlara un poco de él para avergonzarlo de este echo.

Un escalofrió recorre mi espalda al escuchar un crujir en la madera, no tan lejos en donde estábamos.

"Brahms".

Pensé.

—Le agradas, Señorita __________—Al escuchar la misma frase que momentos antes había dicho su marido, comencé a creer que probablemente era malo y no bueno.

—Me alegro, a mi también me agrada—Mentí con una brillante sonrisa, forzando todo de mi para que mi mentira pareciera real.

—Eso es bueno—Al ver la cálida sonrisa de la mujer, noté que la había convencido—Estoy enterada de tu "condición", realmente me preocupa que tengas problemas con ello aquí—Soltó de repente, yo parpadee un par de veces.

"¿Que cosa?"

Pensé, y luego algo hizo click en mi cabeza.

—¡Ah, claro!—Exclame, la mujer me observo ante mi extraño comportamiento, me sonrojo y volví a tomar compostura al ver la sorpresa en sus ojos—Lo siento...—Musite, ella rio, era la primera vez que la escuchaba reír.

—Vaya, los jóvenes están llenos de energía, me recuerdas a mi Brahms—Dijo, besando la mejilla del muñeco, yo trague en seco.

"No me compare con un loco, Señora"