_Capítulo 22: Una noticia agridulce ( continuación)

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El día después de la propuesta de Max, Aide y él estaban sentados en la sala de su casa, hablando sobre los planes para la boda. De repente, Aide mencionó a Leonardo.

"Deberíamos invitarlo a la boda", dijo Aide. "Es un buen amigo y siempre ha estado allí para mí".

Max asintió. "Sí, es una buena idea. Lo invitaré".

Max envió una invitación a Leonardo, quien la recibió con una mezcla de emociones. Se sintió feliz por Aide, pero también se sintió un poco triste al saber que ella se casaría con otro hombre.

Cuando Max llamó a Leonardo para confirmar su asistencia, Leonardo dudó.

"No sé si puedo ir", dijo. "Tengo otras cosas que atender en ese momento".

Max se sorprendió. "¿Qué pasa? Pensé que eras un buen amigo de Aide".

Leonardo se sintió un poco culpable por no decir la verdad. En realidad, quería ir a la boda para ver a Aide una última vez, para intentar hacer algo para evitar que se casara con Max.

"No es eso", dijo. "Es solo que tengo algunas cosas personales que atender".

Max se rió. "Bueno, espero que puedas venir. Aide te extrañaría si no estás allí".

Leonardo se sintió un poco más culpable al oír las palabras de Max. Sabía que no podía ir a la boda con la intención de intentar separar a Aide y Max. Pero no podía evitar sentir que esto era su última oportunidad para hacer algo por el amor de Aide.

"Lo siento", dijo finalmente. "No puedo ir".

Max se despidió de Leonardo y colgó el teléfono. Aide se acercó a él, preocupada.

"¿Qué pasó?", preguntó. "¿No puede venir?"

Max se encogió de hombros. "Dice que tiene otras cosas que atender".

Aide se sintió un poco triste al oír las palabras de Max. Había esperado que Leonardo estuviera en su boda, pero ahora parecía que no sería posible.

"Bueno", dijo. "No podemos hacer nada al respecto".

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