Aide estaba en confusión, pero Leonardo la tomó de la mano y dijo:
"Entonces te robaré ahora".
Aide aún con miedo, intentó aceptarlo:
"¿Qué... qué vas a hacer?"
Leonardo sonrió:
"Voy a llevarte conmigo, lejos de aquí. Solo tú y yo".
Aide se sintió abrumada, pero también emocionada:
"¿Y... y qué pasará con Max? ¿Y con la boda?"
Leonardo se encogió de hombros:
"No importa. Lo único que importa es que estemos juntos".
La hermana de Aide, que había estado observando la escena, se rió:
"¡Esto es increíble! ¡Mi hermana se va a fugarse con su amor!"
Aide se sintió avergonzada, pero Leonardo la tomó de la mano y la llevó hacia la puerta.
"Vamos, Aide. Vamos a empezar nuestra nueva vida juntos".
La hermana de Aide los detuvo:
"Esperen, esperen. ¡No se vayan sin decir adiós!"
Aide se volvió hacia su hermana y la abrazó:
"Gracias, hermana. Gracias por entender".
La hermana sonrió:
"Siempre quisiste conocer su país, ¿no?"
Aide y Leonardo se miraron y ambos pensaron lo mismo. Era el comienzo de una nueva aventura juntos.
Aide y Leonardo salieron corriendo de la habitación, con la hermana de Aide riendo detrás de ellos.
"¡Esto es increíble!", gritó la hermana. "¡Mi hermana se fugó con su amor!"
Mientras corrían, Aide se volvió hacia Leonardo y preguntó:
"¿Qué vamos a hacer ahora?"
Leonardo sonrió:
"Vamos a ir a mi casa. Mi madre te encantará. Le encantaría conocerte".
Aide se rió nerviosamente:
"Espero que sí. No quiero que piense que soy una fugitiva".
Leonardo se rió también:
"No te preocupes. Mi madre es genial. Le encantarás".
De repente, escucharon un ruido detrás de ellos. Era Max, el novio de Aide, que los perseguía en su coche.
"¡Deténganse!", gritó Max. "¡Aide, regresa aquí!"
Leonardo tomó a Aide de la mano y la llevó hacia un callejón cercano.
"¡Vamos!", gritó. "¡Tenemos que escondernos!"
Mientras corrían por el callejón, el amigo de Leonardo, Juan, apareció de repente y comenzó a distraer a Max.
"¡Hey, Max! ¡Qué onda! ¡Te estás perdiendo la fiesta!", gritó Juan.
Max se detuvo y se volvió hacia Juan, lo que les dio a Aide y Leonardo la oportunidad de escapar.
"¡Gracias, Juan!", gritó Leonardo. "¡Te debo una!"
Juan se rió y les hizo un gesto de despedida.
"¡Buena suerte, amigos! ¡Que sean felices!"
Aide y Leonardo continuaron corriendo hasta que llegaron a un coche que los esperaba. Se subieron y se alejaron de la iglesia, con la hermana de Aide y Juan riendo detrás de ellos.
"¡Esto es increíble!", gritó Aide. "¡Me siento como en una película!"
Leonardo se rió y la abrazó.
"¡Es la aventura de nuestras vidas!", gritó. "¡Y estamos juntos!"
ESTÁS LEYENDO
corazones sin límites
Random"Corazones al límite" *Sinopsis:* Leonardo y Aide son dos amigos de la infancia que se reencuentran después de años de separación. Su amistad se reaviva, pero pronto descubren que sus sentimientos van más allá de la amistad. Mientras navegan por sus...