Cap. ✶ 10

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- Te amo más.

Suguru no sabia cuanto duro, o cuando acabo, solo sabia que nunca había sentido algo así en su vida, su pecho se movía de arriba hacia abajo, su respiración era pesada y agitada, y se podía sentir el calor en la habitación a pesar de estar en otoño. El chico aún sentía el toque de los dedos de Satoru, sosteniendo sus caderas con fuerza cada que follaba sus entrañas, el ruido de sus pieles chocando y los gemidos de ambos que parecían el coro de una canción.

Satoru y Suguru jamás lo habían hecho con algún hombre, ni mucho menos habian pensado en hacerlo. Ambos fueron torpes a la hora de hacerlo, pero eso los hizo sentir mucho más seguros, saber que ninguno realmente sabia que hacer o como hacerlo, pero eran mejores amigos, y a pesar de todo, se conocían mejor que nadie en el mundo.

Porque no eran novios, no eran amantes, no eran desconocidos, eran dos personas perdidamente enamoradas de la otra.

Y con eso bastaba, con eso era suficiente.

- Ven, te ayudare a limpiarte.

Susurro Satoru, limpiando con delicadeza el pecho del contrario que aún tenia restos de semen y algo de sudor. Suguru asintió con suavidad, relajándose ante la suave tela de la camisa de algodón que Satoru frotaba contra su piel.

Suguru quiso decir algo sobre la palabra "te amo" que había escapado de la boca de ambos al venirse, quería preguntarle si era verdad que lo amaba, pero se detuvo a si mismo antes de abrir la boca y decidió solo tomar el momento y guardarlo en su mente. Se preguntaba y a la vez le aterraba la idea de que quizás Satoru se había dejado llevar por la sensación del placer y había dicho eso sin pensarlo realmente.

Ambos se habían dado todo lo que tenían para entregar, incluso se habían dado mucho más.

Satoru lo observo de una manera que casi hizo que su piel se derritiera y solo quedara su corazón a total disposición del chico, casi hizo que le dijera

"Aquí esta mi corazón, haz lo que quieras con el, destruyelo en pedazos, vuélvelo a juntar, robalo, es tuyo."

El pensamiento casi hizo a Suguru reír, se sentia tan vulnerablemente enamorado.

- Entre todas mis fantasías, escenarios que imaginaba que algún día sucederían y sueños salvajes...jamás soñé con esto.

Murmuro Suguru, observando al techo. Lo dijo de una manera sorprendida, pero no era un quejido, solo una observación. Satoru sonrió al escuchar sus palabras y dejo escapar un suspiro.

Satoru lo abrazo con tantas fuerzas, como si tuviera miedo de despertar de algún sueño, como si tuviera miedo de que Suguru se alejara de su lado. Quería tocarlo para recordar siempre como era tener su piel bajo sus brazos, recordarlo hasta el dia de su muerte como se sentia la vida, que para él era Suguru, su voz, sus gemidos, su piel suave, su cabello negro y ligeramente largo, su boca y esos ojos que se alzaban cada vez que Satoru lo llamaba por su nombre.

Estaba hambriento por vida.

- 18 años...

Dijo Satoru, y Suguru frunció el ceño suavemente confundido, observándolo expectante.

- 18 años estuve sin conocer verdaderamente lo que era vivir.

Suguru solto una risa torpe y nego suavemente antes de preguntar "¿Qué es vivir?"

- Tu, todo tu es vivir, tu eres vida.

Dijo Satoru muy seriamente y Suguru volvió a reír torpemente, escondiéndose en el hueco del cuello del contrario.

- ¡Lo digo en serio!

Se quejo el chico, riendo tambien.

-Esta bien, esta bien. Te creo.

Se rindió finalmente. Le costaba admitir que lo que Satoru le había dicho hizo que su corazón se derritiera por completo y sus mejillas sonrojarse torpemente. Amaba que el chico le dijera ese tipo de cosas, se sentía como un apapacho al corazón, y honestamente, Suguru se sentía completamente igual a Satoru. Cuando sintió su piel sobre la suya y sus cuerpos uniéndose una y otra vez sintió que había nacido, que todos los años atrás no existían y que cuando sus labios tocaron los suyos nació finalmente. Y estaba aterrado, no quería que el sentimiento acabara jamas, se sentía tan bien.

Suguru se sentia algo sucio por el sudor y el semen, asi que dejo un suave beso en los labios de Satoru y se levanto. Una ducha ayudaría bastante.

- Me ire a duchar, Toru, vuelvo enseguida.

- No tardes, te extrañare.

Dijo, guiñándole el ojo antes de soltar su mano y dejarlo dirigirse al baño.

Mientras se duchaba se relajo, se sentía pleno y satisfecho, así que cerro los ojos por un momento antes de salir de la ducha y envolver su cuerpo en una toalla, caminando nuevamente hasta la cama para conseguir ponerse algo de ropa.

Satoru le clavo los ojos mientras el chico se vestía, observando su piel estirarse y volverse a doblar cuando se movía para ponerse los pantalones y la camisa. Estaba decepcionado porque amaba verlo desnudo, su cuerpo era hermoso para él, parecía alguna estatua antigua de un museo, y eso le parecía tan sexy...por alguna razón.

- Preparare el desayuno.

Musito Suguru con una sonrisa suave al terminar de vestirse y Satoru se dedico a asentir.

- Yo me duchare de mientras, amor.

Suguru no pudo evitar sonreír al escuchar su apodo, asintiendo en silencio mientras sentía su corazón a mil por hora. Y es que, no importaba cuanto tiempo pasara, se seguía emocionando con cosas tan estúpidas como apodos cursis.

Camino a la cocina y comenzó a preparar el desayuno, esperando a que el chico terminara de ducharse, al final se había decidido por pancakes, eran los favoritos de Satoru. A pesar de que no era muy bueno cocinando, estaba seguro de que con un poco de amor y mantequilla quedarían deliciosos, o bueno, eso esperaba.

Se sentía muy bien, estaba cómodo. Tenia a Satoru, tenia sus besos, sus manos, su amor, y era un domingo por la mañana, todo era perfecto...

"Suguru...Suguru, despierta, vamos."


Nota de la autora:

Hola, jeje, disculpen la ausencia por tantos días, fueron meses estresantes pero finalmente me siento bien para seguir escribiendo y quizás empiece con otra historia! Me siento inspirada por varios libros que he estado leyendo. Cambie un poco la forma de narrar ya que estoy escribiendo desde mi laptop, espero no les moleste :)

Este ya es el penultimo cap! JAJAJ, les dejo la ultimas palabras a su consideración, me gustaría escuchar sus teorías en los comentarios sobre la ultima la oración, los quiero, gracias por leer!

Esperen el ultimo cap en la proxima semana, o hasta la otra.

La Esquina de la Calle 8 • SatosuguDonde viven las historias. Descúbrelo ahora