- ¿ Y tú ? ¿ No has pensado en casarte ?
Isolda se encontraba en un lugar que no conocía. Era un jardín inmenso con esculturas de cuerpos humanos en todas partes y flores de todos los colores. Ella estaba vestida completamente de blanco y una faja dorada en su cintura, mientras que en los pies utilizaba sandalias. El hombre en frente de ellas era idéntico a Tristán, vestido de soldado igualmente usando sandalias
Inspeccionó el lugar, tratando de reconocer alguna de las figuras, Pero ningun recuerdo de su mente parecía conectar con el paisaje. Luego, se dió cuenta de que esto era lo que sus padres llamaban "La antigua Grecia ", pero no se podía explicar porque se encontraba en ese lugar.- No, principe, antes así era, pero ya no tengo el deseo de casarme.
- ¿ Y si se le declararán lady Isolda ?
- Tal vez podríamos tener una buena relación, pero no llegaríamos al matrimonio...
- ...... Ya veo......
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- Prin...cipe.... Tri....Tristán....Isolda se encontraba en el piso de lo que parecía ser un templo. Tenía manchas de color rojo en todo su cuerpo y miraba fijamente al hombre idéntico a Tristán quien sostenía una espada y la miraba con lágrimas de desesperación en sus ojos.
- ..... Lo siento..... Isolda, mi amor.....
Clavo la espada en su estómago matandola al instante, siendo un grito desgarrador lo último que escucho para luego volver a la realidad con el cuerpo sudando como loco.
Miro a su lado, Tristán no se encontraba con ella, estaba sola, y el ambiente a su alrededor no le agradaba para nada.
Se paró de la cama, pero sintió algo, como si la habitación fuera más alta de lo que recordaba, sentía que el lugar se había agrandado.
Fue a mirarse al espejo, pensando en su sueño, y en qué podría estar ocurriendo en su cabeza. Miro al frente, y se quedó quieta como una piedra en el desierto. Nuevamente, su cabello había cambiado de color, está vez a un negro tan oscuro como la noche.
Sus ojos seguían intactos y su rostro igual, pero cayó en cuenta de que ahora era más pequeña, y aunque antes esto la hubiera aliviado, sentía que ya no podía reconocerse a si misma en el espejo, que estaba mirando a una desconocida en lugar de a ella misma.
Se derrumbó en el piso, inclusive su cabello había cambiado, ahora era más largo y le llegaba a las rodillas. Las lágrimas de desesperación y confusión no paraban de salir de sus ojos verde esmeralda, que extrañamente seguían iguales.
Se escucharon pasos dirigiéndose a la habitación, aterrandola, no queria que la vieran así, ¿ Que pensarían los demás de ella ? Seguramente no la reconocerían, o se sentirían asqueados por su apariencia. Tocaron un par de veces la puerta.
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Tristán x isolda
RomansaIsolda siempre estuvo enamorada de Tristán.Lo seguía a todas partes lo apagaba, lo defendía, pero el principe de Lioness jamás se dió cuenta de lo que sentía, pero hace dos años un incidente en el Reino demoníaco cambia la vida de ambos y se tendrá...