Unidos ♡ (Minho y tú)

Capítulo 14

Estaba recostada sobre un incómodo colchón, tenía frío y por alguna razón me encontraba algo inquieta. Me levanté para acercarme a la cama de al lado, donde se encontraba recostada una persona.

—Sonya—susurré algo asustada.

—¿___?—escuché la voz adormilada de la dulce niña.

—¿Puedo dormir contigo?—restregué mis pequeñas manos por mi cara mientras me quitaba algunas lágrimas.

—¿Pesadillas otra vez?—vi como se removía en su cama para fijar sus ojos en mí, yo solo asentí—Ven aquí—abrió su cama, yo sin esperar ni un segundo más me subí con algo de dificultad y la abracé.

—Perdón por despertarte—murmuré apenada.

—Tranquila, mientras Thomas no esté, yo te cuidaré—dejó un beso en mi cabeza—Ahora duerme, las pesadillas no regresaran esta noche—me acurruque más cerca, siento aquel calor tan familiar que me hizo descansar en un profundo sueño.

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Me encontraba escondida en una pequeña abertura de un pasillo, al ser pequeña entraba con facilidad, siempre era la primera en perder.

—Listo o no allá voy—escuché resonar por los pasillos.

Me encogí aún más en mi lugar, escuché los pasos de un pequeño corriendo cerca de mi. Por lo que tapé mi boca con mis manos para no emitir ningún sonido. Lo cual funcionó ya que se alejaron de mí.

Me mantuve varios minutos en la misma posición, callada y controlando mi respiración. Estaba atenta a todos los ruidos a mi alrededor, todo estaba tranquilo hasta que escuché unas pisadas fuertes resonando por el pasillo, pero de repente se detuvieron.

Mi corazón comenzó a latir con fuerza por el susto, si era la Doctora Ava, estábamos acabados, ella nos regañaba y casi siempre nos termina castigando por nuestra conducta inapropiada.

—Te encontré, ___—habló fuertemente con voz juguetona el señor Janson.

Pegué un grito asustada al verlo, y rápidamente salí de mi escondite intentando escapar de él. Pero no lo conseguí ya que me agarró del brazo.

—¿A dónde vas, ___?—me dió esa sonrisa que siempre me daba escalofríos.

—Tengo que buscar a Thomas y los demás, señor—contesté algo asustada.

—¿Están jugando otra vez?—preguntó mientras se agachaba a mi altura—La Doctora Ava se enojará si se entera—yo me intenté alejar lo más que pude, pero era casi imposible.

—Lo siento mucho señor Janson—baje mi cabeza, evitando su mirada.

—Pero puedo guardar el secreto—sentí como dejaba caricias en mi cabello.

—Señor, tengo que irme—mi corazón latía muy fuerte, estaba aterrada ante su tono de voz.

—¡___!—escuché la fuerte voz de Thomas.

Lo que hizo que el señor Jason soltara mi brazo, por lo que rápidamente corrí hasta llegar a mi hermano.

—Te estábamos buscando, Newt encontró a todos menos a tí—yo solo lo abracé escondiendo mi rostro en su pecho.

—Thomas—lo llamó el señor Janson—No deberían estar jugando—mi hermano me envolvió en sus brazos de forma protectora.

—Sí señor—le respondió mientras comenzaba a caminar conmigo.