Zephiros x Genshin Impact

Capítulo 23: Jean y Barbara

Los días pasaban con total normalidad, con Zephiros e Aether recuperándose de sus lesiones con los cuidados dados en la Catedral, mientras que en otro lado la gente seguía con sus días matutinos pero más específicamente Jean, la Gran Maestra intendente.

Secretaria: -Con una voz suave y firme- Gran Maestra, he venido a informarle que Zephiros ya ha despertado. Los sanadores aseguran que en unas horas estará en condiciones de salir de la Catedral.

El anuncio llegó como un bálsamo para Jean, quien se encontraba en su oficina revisando documentos con el ceño ligeramente fruncido. La presión de liderar Mondstadt y, además, lidiar con la súbita caída de Zephiros había sido intensa. Al escuchar la noticia, sus hombros se relajaron, dejando escapar un suspiro de alivio.

Jean: -Con una sonrisa de alivio- ¡Gracias por informarme! Me alegra saber que ya está mejor.

Sin embargo, mientras procesaba la noticia, Jean se dio cuenta de algo más. Un suave ruido a su derecha la hizo voltear ligeramente. Lisa, quien hasta ese momento había permanecido en un rincón apartado de la habitación, estaba allí, apoyada contra la pared con una expresión que mezclaba curiosidad y diversión. Aparentemente, había estado escuchando todo desde las sombras, su mirada juguetona y sus labios curvados en una sonrisa maliciosa.

Lisa: -Con tono burlón, acercándose lentamente- Vaya, vaya, querida Jean... ¿Tan preocupada estabas por nuestro querido Zephiros? Ese suspiro fue casi dramático. Nunca te había visto tan... ansiosa.

Jean se tensó un poco, sabiendo exactamente a dónde iba Lisa con esa provocación. Intentó recomponerse rápidamente, pero el sonrojo en sus mejillas la delató.

Jean: -Tratando de mantenerse seria- No digas tonterías, Lisa. Como líder de Mondstadt, es mi responsabilidad preocuparme por todos los ciudadanos.

Lisa rio suavemente, disfrutando claramente de la incomodidad de su amiga.

Lisa: -Dándole un golpecito en el hombro- Oh, claro, claro. Pero ese brillo en tus ojos cuando te dijeron que estaba bien... No es algo que se vea todos los días. Diría que alguien en especial te tiene más que preocupada.

Jean giró los ojos, tratando de restarle importancia al comentario, aunque en el fondo sabía que Lisa tenía razón. Había sentido un nudo en el estómago cuando le avisaron que Zephiros había colapsado días atrás, y ahora el alivio la embargaba por completo.

Jean: -Con voz firme, intentando desviar la conversación- Es natural preocuparse cuando un aliado importante cae enfermo, Lisa. No tiene nada que ver con lo que insinúas.

Lisa no estaba convencida y, fiel a su estilo, decidió ir un paso más allá.

Lisa: -Con una mirada juguetona- Mmm... Claro, claro. Aunque recuerdo perfectamente lo rápido que corriste cuando te informaron de su condición.

Lisa: Podríamos haber cronometrado tu reacción. Y ni hablar del tiempo que pasaste en la oficina esperando noticias...

Jean: -Defendiéndose, ligeramente incómoda- Solo estaba haciendo mi trabajo. No puedes culparme por tomar mis responsabilidades en serio.

Lisa se inclinó hacia ella, bajando ligeramente la voz, como si compartiera un secreto.

Lisa: -Con un tono pícaro- Oh, querida, todos sabemos cuán seria eres. Pero a veces, ser demasiado 'responsable' puede delatar otros... intereses.

Lisa: Zephiros es atractivo, y admito que tiene cierto... encanto misterioso. No me sorprendería si te hubiera cautivado.

Jean la miró con una mezcla de exasperación y resignación. Sabía que era inútil discutir con Lisa cuando ella decidía molestarla. Aunque, en el fondo, las palabras de Lisa la hicieron reflexionar. Zephiros ciertamente era diferente, y su llegada había causado un impacto en Mondstadt... y en ella.