AMOR ENTRE BALAS Y NARCOTRAFICO FREENBECKY Y FAYE&YOKO G'ip II TEMPORADA

CAPITULO 73

UCI - Cuarto de Faye
El caos en la habitación se intensifica. Los sonidos de las máquinas que monitorean a Faye se mezclan con las órdenes rápidas y precisas de los médicos. La crisis es inminente. Yoko, de pie en la esquina, observa con el corazón en la garganta, cada latido suyo parece acompasado con los bip erráticos de los monitores.

Freen está a su lado, firme pero tensa, intentando mantenerse serena por Yoko, aunque el miedo la carcome por dentro. Ambas saben que cada segundo cuenta, que cada decisión que tomen los médicos es vital.

Uno de los doctores, el que parece estar al mando, da una orden rápida.

Doctor- (Con voz firme). Preparen el desfibrilador. Tenemos que actuar rápido, su ritmo cardíaco está cayendo.

Yoko siente que el suelo se hunde bajo sus pies al escuchar esas palabras. No puede moverse, apenas puede respirar. Solo mira a Faye, su Faye, y se aferra desesperadamente a la pequeña esperanza que le queda.

Las enfermeras corren a preparar el equipo mientras uno de los médicos trata de estabilizarla. Los segundos se sienten como horas para todos en la habitación.

Doctor- (Gritando a las enfermeras). ¡Carga a 200! Vamos, rápido.

El tiempo parece ralentizarse. Yoko, con lágrimas en los ojos, observa cómo los médicos colocan los parches del desfibrilador sobre el pecho de Faye. Ella se estremece al ver lo frágil que se ve su esposa, tan vulnerable, tan lejos de la mujer fuerte y decidida que siempre ha conocido.

Doctor- (Con voz autoritaria). ¡Despejen!

El doctor aplica la primera descarga, y el cuerpo de Faye se sacude levemente. Las máquinas vuelven a emitir un pitido continuo, pero el doctor sacude la cabeza, indicando que no ha sido suficiente.

Doctor- ¡Sube a 300! ¡Vamos otra vez!

Las lágrimas de Yoko se vuelven incontenibles. Freen la sostiene fuerte, intentando transmitirle algo de fortaleza, aunque ambas sienten que la situación se les escapa de las manos.

Yoko- (Sollozando, apenas audible). Por favor, Faye... amor, por favor... no te vayas... No nos dejes.

La segunda descarga es más fuerte. El cuerpo de Faye responde con otro sacudón, pero los monitores siguen sin registrar mejoría. El doctor maldice en voz baja y se inclina sobre el pecho de Faye para aplicar una última maniobra manual. La presión en la habitación es sofocante.

Doctor- (Con desesperación en su voz). ¡Una vez más! ¡Carga a 360!

El personal médico parece dudar por un momento, pero saben que no tienen otra opción. La vida de Faye depende de esta última descarga.

Doctor- ¡Despejen!

Esta vez, la tercera descarga es brutal. El cuerpo de Faye se arquea en la cama, y por un instante, todo el sonido en la habitación parece detenerse. Yoko, completamente en shock, deja escapar un grito ahogado, como si el dolor en su pecho fuera tan físico como el que Faye está experimentando.

Pero entonces, algo milagroso sucede. Los monitores, que habían estado emitiendo un sonido continuo y plano, de repente empiezan a emitir un bip rítmico y constante. El corazón de Faye está latiendo de nuevo.

El doctor suelta un suspiro de alivio mientras las enfermeras rápidamente ajustan las máquinas.

Doctor- (Con voz tensa, pero aliviada). Está estabilizada... por ahora.

Yoko se derrumba en los brazos de Freen, sus piernas no pueden sostenerla más. No es un alivio completo, pero es una chispa de esperanza, una posibilidad de que Faye esté luchando, de que todavía esté con ellas.