capítulo 13

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— Fourth, dame la mano. — insistió Dunk, mientras caminaban por la vereda hacia el supermercado.

— ¿crees que me puedo caer? — bromeó, colocando las manos en los bolsillos de su pantalón, solo por llevarle la contraria.

— es una certeza, no una creencia. — su amigo lo tomó del brazo de todas formas. — así que, ¿abastecemos tu despensa porque Gemini come algo más que tus labios cuando está en tu casa?

— asno. — murmuró, algo sonrojado. — Gemini viene a verme después de sus turnos. después de dormir, cocinamos juntos. así que sí, se consume lo que compro para abastecer la despensa.

Dunk sonrió, apretando su brazo. — ¿hablas de dormir, o de dormir? — el más alto gimió bajito en su oído.

Fourth lo golpeó en el brazo, alejándose de él con espanto, mientras Dunk perdía la respiración riéndose.

— eso quiere decir que no has tocado a tu novio de leo ni con el pétalo de una flor. — suspiró su amigo, como si realmente lo lamentara. — vaya caso médico eres.

— Gem no es un asno como tú, que necesita ser manoseado. — Fourth tomó el primer carrito que encontró, con tal de mantenerse lejos del otro.

— para tu información, mi vecino no me ha manoseado. — Dunk hizo un puchero, arrebatando el carrito de sus manos. — él realmente me hace ver películas cuando me invita a su departamento.

fue el turno de Fourth para reírse. — y yo realmente duermo con Gemini cuando lo invito.

Dunk manejó el carrito, mientras él leía la lista, acomodando todos los envases de vidrio, para evitar que los pudiese romper. también Dunk eligió los envases de los productos en polvo, porque Fourth levantaba siempre los que estaban rotos, haciendo pequeños desastres.

— 🚑 —

Gemini golpeó la puerta, siendo recibido por un Fourth cubierto de un blanquecino polvo hasta las cejas.

— ¿qué te pasó, Fot? — preguntó, entrando cuando el más bajo lo invitó, para buscar un paño.

al pasar por la cocina, observó en el suelo harina, y en la encimera un envase de papel con la mitad de su contenido.

— tomé mal el envase, y se rompió. — explicó Fourth, luciendo avergonzado.

— entiendo que el suelo esté así, ¿pero qué hay de tu carita? — rió el mayor, limpiándole el rostro con el paño que humedeció.

— pues, tomé el envase para dejarlo arriba de la alacena. — murmuró. — la harina primero me cayó a mí, y luego al suelo.

eso explicaba porqué estaban marcadas dos huellas.

al dejar su cara limpia por completo, Gemini se inclinó ligeramente y besó a Fourth, causando que se sonrojara.

— no tuve oportunidad de saludarte minutos atrás. — se excusó, volviendo a besarlo. — hola, Fot.

— Gem. — sonrió el más bajo. — llegaste antes, ¿qué pasó con tu turno?

— lo intercambié con otro médico, para que vayamos al cine a ver la película que estabas esperando que se estrenara. — contestó, rodeando la cintura del menor con sus brazos para corresponder su espontáneo abrazo.

— no tenías que hacer eso. — murmuró Fourth.

— lo hice porque quiero. — Gemini se alejó para verlo a la cara. — es una cita.

Fourth ya no huía ni se accidentaba cuando hablaba de que estaban teniendo citas, esperaba que reaccionara de la misma forma en el futuro, al proponerle ser novios.

¿Puedes ser mi médico? | GeminiFourthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora