Se inclinó otra vez hacia mí para besarme, más le cubrí la boca para evitarlo. —Se acabó la generosidad.
Se apartó de mí y sonrió, esa sonrisa me dice que ella se siente victoriosa. —Fue bueno mientras duró, ahora, puedes irte, que Bob se encargará de vigilarme desde la lejanía.
—¿Sabes de Bob?
—Ay obvio, somos amiguis y todo, él llamó a la ambulancia aquella vez por mí, ya sabes, estaba en estado de shock. En fin, ya puedes irte que yo dentro de un rato me iré de fiesta.
Y sin más se fue… ¿no preguntará del beso?, ¿se va como si nada? —Me siento utilizado—mascullé.
Minutos más tarde
El Dr. Brandon ingresó a su propia oficina y tomó asiento frente a mí, que he venido de improvisto y sin cita previa. —Carter, me han dicho que estás de urgencia, ¿qué dolor tienes?
Me deslicé al borde del sofá y lo ojeé suplicante. —Creo que moriré, escuche aquí—señalé mi pecho espantado.
Con el estetoscopio inició a escuchar y analizar atentamente los latidos que me aturden el cuerpo. —Tu corazón está acelerado.
—Exacto—exclamé—, desde hace un rato no se detiene, me voy a morir, ¿cuánto tiempo me queda de vida?
Examinó mi presión arterial y otras cosas. —Carter, tu presión está perfecta, pero, los latidos por segundo que da tu corazón no son normales, ¿en qué estás pensando? —ha vuelto a utilizar su estetoscopio.
—En nada—ahora que lo recuerdo, dejé el trabajo abandonado, tengo tantas cosas que hacer.
—Tus latidos han vuelto a ser regulares, ¿qué ocurrió antes de que vinieras?, ¿cuál fue el motivo que desencadenó tu preocupación?
—Bueno… —es cierto, dejé el trabajo botado por ir a ver a Kalea, ¿por qué lo hice? Es decir, quería verla y mis impulsos terminaron venciéndome—nada diferente—exhalé lentamente al recordar el beso bajo la luz de la luna.
—Cierra los ojos—cumplí su petición—, te sentías mal antes—negué con la cabeza—, tienes que responder—con su estetoscopio sigue presionando mi pecho.
—No, no me sentía mal.
—¿A inicios de este año el tamborileo se manifestó?
—No.
—¿Era bonita?
—Muy bonita—en mi cabeza hay una imagen de Kalea sonriendo—, incluso su aroma a perfume costoso es increíble—aún tengo ese olor sobre mi ropa.
—¿Es agradable?
—Su personalidad es preciosa, todo lo que la representa lo es.
—¿Qué te gusta?
—Su espontaneidad, me hace olvidar quien debo ser… Dr. Brandon, siento que moriré, el pecho me está doliendo demasiado por cuenta de estas extrañas preguntas, ¿son totalmente médicas? —resoplé—, ¿moriré?
Al no conseguir una respuesta abrí los ojos, solo para hallar que mi médico de cabecera está concentrado escribiendo en su recetario. —Morirás si no consigues esto con urgencia.
En mis manos terminó su receta. —¿Amor? —arqueé las cejas al verlo de vuelta.
—Estás enamorado, ve por la señorita y no me vengas a molestar con estas cosas cuando estás más que sano—rezonga indignado—. Si no consigues eso que te receté morirás en serio, nunca te había visto en ese estado antes, ni siquiera cuando conseguías un dulce de pequeño, siempre mantienes tus emociones escondidas y esa dama ha logrado hacer que te descontroles un poco.
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Desde ahora conquistaré su corazón
Romance¿Hay algo peor que el amor? Esa es la pregunta que se realiza todos los días Carter Myers, un reconocido abogado de la Gran Manzana que acaba de dejar atrás su amor platónico de la universidad, pero, ¿por qué cree que ese sentimiento es lo peor? Res...