07

6 3 4
                                    

« Cosas interesantes »

Lilith y Bael continuaron conversando poniendose al día, estaban afuera cerca del lago de su casa. La atmósfera era cargada de energía oscura y emocionante.

— Dime Bael — comenzó Lilith — cuáles son tus verdaderos motivos para ayudarme. ¿Que sucedió allá abajo para que decidieras unirte a mi tan fácil?

Bael sonrió, con una expresión enigmática en su rostro — Eres muy lista Lilith, siempre has sido así, recuerdas esos tiempos cuando haciamos desastres a escondidas de todos.

Lilith asintio, recordando aquellos días con una sonrisa traviesa y de horror — Claro que lo recuerdo. Pero fue hace mucho tiempo.

— Mucho tiempo — repitió Baal — Desde entonces, muchas cosas han cambiado. Satanás me traicionó Lilith, ese maldito perro me envió a una batalla perdida, una trampa mortal. Pero yo no soy alguien tan fácil de eliminar. Me hice pasar por muerto y desapareci en las sombras hasta que tú me trajiste aquí liberandome en este plano existencial.

Lilith se sorprendió, Satán lo tenía como favorito. — Así que fuiste tu quien me trajo aquí, fuiste quien irrumpió esa noche dejandome escapar? — preguntó sorprendida

— Si — confirmo Bael sonriendo — me debes una mi querida Lilith.

Ella sonrió de manera perversa

— Tengo mucho tiempo que no me divierto querido — dijo con voz suave acercandose a Bael, Pero al instante se detuvo

— Que hay de los otros? — pregunto Lilith — No crees que podamos buscar alianzas allá abajo?

Bael asintió pensativo

— Porsupuesto. Hay muchos de ellos poderosos que están hartos Pero no cualquiera se pondrá en su contra, solo unos cuantos malditos... — y su sonrisa creció mucho poniéndose cada vez más siniestra — Y tengo uno en mente que con un poco de persuasión podríamos convencerlo de unirse a nosotros.

— Y ese es? — pregunto Lilith con cara de fastidio

— Belial — soltó Bael

Lilith estalló en carcajadas había conocido a Belial Pero solo por tratos Pero nunca pensó que él fuera alguien que traicionaria a su fiel amo

— Belial es un ser tan poderoso como yo. Sin embargo, su cuerpo físico fue ocultado mediante magia oscura, obra de brujas de ese entonces.

Lilith frunció el ceño — Brujas esas perras metiendose en todas partes, eso nos complica las cosas, su magia nos daña debemos idear un buen plan si queremos llegar vivos.

Bael asintió

— Lo sé, pero imagina el poder que tendríamos con si pudiéramos unir nuestras fuerzas con Belial.

Lilith se quedó pensando

— La idea de tener a Belial de nuestro lado es tentativa, Pero también peligrosa Bael, el siempre fue muy aliado de ese, también desconocemos el lugar donde reposa su cuerpo.

— Se dice que se llama las grutas de tochilpud — respondió Bael — un lugar que las brujas tomaron luego de descubrir la biblia negra, ahí los demonios hacían posesiones y cultos cuando nuestros cuerpos vagaban por este plano existencial. Y creo que vale la pena intentarlo.

Los dos se quedaron en silencio

— A los lobos no les hace mucho daño la magia por su poder de regeneración rápida no?

Baal asintio sonriendo y contesto

— Unos lobitos deberán sacrificarse para salvar al mundo — Lilith asintio sonriendo — Pero cuál, debemos buscar unos que sean fuertes y que no se vayan a último minuto.

Lilith sonrió aún más

— Pues que el propio rey nos lleve, salud — dijo haciendo aparecer una copa

— Y según tu porque brindamos — pregunto desconcertado Bael

— Por la guerra próxima y por la caída de ese perro de Satán — Bael asintió y brindo con ella.

— Ahora me explicas como vamos a llevar al rey. Tengo entendido que unos demonios terminaron con las vidas de sus padres y familiares, nos detesta

Lilith sonrió, algo que hacía mucho para no decir siempre

— Eso querido Bael déjamelo a mi

Baal la miraba curioso

— Anda querida dime qué harás para convencerlo, porque no creo que caiga antes tus encantos — dijo pasando una mano por su pierna

— Ya lo veremos Bael, sabes muy bien — dijo tocando su pecho — que cuando quiero algo, lo tengo — y con eso se lanzo a besarlo con fuerza y deseo subiéndose en él

Bael gustoso correspondió, el sabía muy bien que Lilith era demasiado fogosa y a él no le molestaba, años pasados tuvieron sus encuentros a escondidas de Satán y todo valía la pena, ella satisfacía su hambre de piel.

— Entonces, como piensas convencer a ese lobo, ellos tienen mates y esa conexión no es fácil de romper o quebrantar — dijo mientras baja sus manos agarrando su tracero

Lilith se separó de Baal y se puso de pie

— Para mi cariño, no hay lazo que me impida tener al hombre que quiera y si el no quiere ir por gusto, será por la fuerza.

Los dos demonios estallaron a carcajadas, mientras afuera los lobos que la habían criado Gia y su esposo escuchaban todo lo que hablaban los demonios. No podían creer que a la niña que tanto habían criado y educado se fuera y solo quedará está parte de ella que la haría ver cómo una mujerzuela.

— No puede ser Héctor — decía Gia triste — como puede ser así

Héctor, que no sabía cómo consolar a Gia, hablo claro

— Sabíamos desde el principio que ella solo era una fachada mujer, ella solo era la cara falsa que usaba para protegerse, esa que está ahí dentro es la verdadera, muchos sabemos su poder, Pero también que es mala y eso nunca va a cambiar.

Gia lo escucho y solo le rezo a la diosa luna, que Lilith tuviera un pequeño hueco en su corazón dónde existiera la bondad y el amor y que no solo reinará el odio.



***
(Cap en corrección)

Lilith Donde viven las historias. Descúbrelo ahora