La mañana después de la reunión, la mansión Rutherford aún resonaba con el eco de la celebración. La casa, ahora cargada de una energía nueva y vibrante, parecía más acogedora que nunca. Seokjin y Jungkook se habían tomado un momento para relajarse y disfrutar de la calma después de la agitada noche anterior.
Sentados en el salón principal, con la luz del sol filtrándose a través de las cortinas y acariciando suavemente los lujosos muebles, Seokjin y Jungkook discutían uno de los detalles más importantes para su hijo, su nombre.
—Creo que ya hemos llegado a la hora de decidir el nombre —dijo Jungkook, con una sonrisa cálida mientras miraba a Seokjin, que estaba acunando a su hijo en sus brazos.
—Sí, es importante que el nombre sea especial —respondió Seokjin, mirando al pequeño con una expresión de ternura. Los últimos días habían estado llenos de tantas emociones que encontrar un nombre adecuado parecía un acto simbólico de cerrar un ciclo y abrir uno nuevo.
Jungkook se inclinó hacia adelante, apoyando los codos en las rodillas mientras observaba a Seokjin. El nombre de su hijo era algo en lo que ambos querían coincidir, reflejando sus esperanzas y sueños para él.
—¿Qué piensas sobre los nombres que hemos considerado hasta ahora? —preguntó Jungkook.
Seokjin pensó por un momento, mirando al bebé con una expresión pensativa. Luego, una suave sonrisa se formó en sus labios mientras se dirigía a Jungkook.
—Hay algo en el rostro de nuestro hijo que me hace pensar en un nombre específico —dijo Seokjin, su voz llena de cariño—. He estado dándole vueltas a esto y creo que el nombre Ian le queda perfecto.
Jungkook frunció el ceño por un segundo, procesando la propuesta. Seokjin siempre había tenido una intuición especial para las cosas, y en el caso de su hijo, parecía tener razón. Se inclinó hacia adelante para observar mejor al bebé, su rostro suave y redondeado, sus pequeños rasgos que le daban una apariencia tranquila y digna.
—Ian, ¿eh? —repitió Jungkook, sonriendo al ver la seguridad en los ojos de Seokjin—. Me gusta. Es un nombre elegante y sencillo, y creo que se adapta perfectamente a nuestro hijo. Además, es un nombre que lleva connotaciones de fuerza y nobleza.
Seokjin asintió, su expresión iluminada por una mezcla de alivio y felicidad.
—Entonces, creo que Ian será su nombre. Me gusta cómo suena y cómo se siente cuando lo digo. Creo que es el nombre adecuado para él.
Jungkook asintió con una sonrisa de aprobación. La elección del nombre parecía ser un paso importante, no solo para su hijo, sino también para su familia. Era un símbolo de su unión y del futuro que estaban construyendo juntos.
—Ian será un nombre muy especial —dijo Jungkook, tomando la mano de Seokjin con ternura—. Y estoy seguro de que llevará ese nombre con orgullo, como el hijo de dos familias que han superado tanto para estar juntas.
Mientras el sol continuaba ascendiendo, iluminando la habitación con una luz dorada, Seokjin y Jungkook compartieron un momento de tranquila alegría. Aunque aún había desafíos por delante, la elección del nombre de su hijo parecía traer consigo una nueva sensación de esperanza y unidad.
El nombre Ian, que ahora llevaba consigo el peso de sus esperanzas y sueños se convirtió en un símbolo de su amor y de su compromiso mutuo. En el suave murmullo de la mañana y en el cálido abrazo de los padres, Ian Montclair-Rutherford se preparaba para comenzar su vida con un nombre que representaba no solo su identidad, sino también la promesa de un futuro lleno de amor y estabilidad.
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El Vínculo de la Oscuridad
FanfictionEn un mundo de alta sociedad y crimen organizado, el doncel Seokjin Montclair enfrenta la presión de un matrimonio forzado con el líder rival Jungkook Rutherford, solo para descubrir que su verdadero desafío es proteger su familia, su amor verdadero...