Cada movimiento que haga o cada paso que diera Stanford Gleeful lo estaría viendo.
Las cosas estaban puestas sobre la mesa, listas para el propósito que Stanford tuviera en mente, había pasado tan solo un día del baile de mascaras y sabía que no se quedarían quietos.
Estando en lo cierto, en lo profundo de los bosques de Reverse Falls había una pareja corriendo, dos inconfundibles figuras, una de un intruso multiversal y otra de un ente multidimensional. Ninguno de los dos pertenecía a ese mundo, de hecho curiosamente ninguno de los dos había pedido llegar allí y sin embargo fueron arrastrados de su hogar para quedar atrapados en aquel pueblo.
Pero querían que hoy eso cambiará, solo habían tenido algunas horas para planearlo aún más reconociendo que el tiempo era limitado, no sabían cuándo actuaría pero estaban seguros que aquel hombre no les dejaría ir fácilmente, aunque Pines aún no lo entendía del todo creía en William que sabía mejor que nadie lo que era capaz ese monstruo encarnado en humano.
Gleeful tomaba asiento en su lugar sabiendo que cada segundo que pasará ellos se estarían alejando más y más, pobres idiotas, si supieran qué por mucho que corrieran o quisieran esconderse no podrían huir. Stanford Gleeful pensaba que si algo pecaban ambos era de ingenuidad y estupido optimismo. ¿Y se supone que esa era su contra parte? Se supone que debía de ser igual de listo que el pero solo dejaba en evidencia quien era el Stanford superior.
Gleeful dejo caer de su mano un collar con un anillo plateado como colgante, el mismo que compartía con William y el que evidenciaba la conexión entre ambos. Sobre la mesa igual se encontraba el diario que había escrito Pines en su corto periodo en aquel mundo, específicamente en una página con un dibujo bastante peculiar pues se trataba de un dibujo de invocación. Y uno de los elementos mas importantes, en un pedestal observándome se encontraba el ojo de Will encapsulado. Tenía todo lo que necesitaba.
Cada día o cada palabra que William dijera el lo sabría.
Gleeful estaba demaciado confiado y furioso de como sus cálculos habían fallado solo por una pequeña variante no planeada. Se sirvió un poco de su Whisky favorito mientras trataba de recobrar la calma, sin embargo ver el anillo le hacía hervir la sangre.
Se supone que el peliazul era un ser dimensional que sabía todo. Soltó una risa divertida ante la ironía, si se supone que era tan inteligente entonces ¿Cómo no podía ver qué le pertenecía? Y en su lugar corría lejos de el, huyendo con otra persona.
Claro que eso no sería por mucho tiempo.
Will corría detrás de Pines, aunque poderoso su cuerpo humano era bastante débil físicamente pero eso no importaba, no cuando sabía que tenía que escapar de aquel lugar costará lo que costará. Mientras corría sintió como algo; una fuerza invisible, jalaba su brazo con brusquedad haciendo no solo que se detuviera sino que retroceda un poco por la fuerza ejercida. De hecho había sido un poco doloroso para su hombro. Se detuvo agitado poniendo sus manos sobre sus rodillas. ¿Qué demonios había sido eso?
-¡Ford!- exclamo alarmado. Castaño al escuchar el llamado volteo hacia atrás y al ver qué se había detenido imitó su acción.
-¿Will?
-C-creo que algo anda mal, no me siento bien.- respondió y sintiendo que finalmente había perdido la fuerza en sus rodillas cayó hincado al piso lleno de hojas, algo andaba terriblemente mal y estaba aterrado. De hecho empezaba a sentir como todo el cuerpo le pesaba y sus piernas ya no le respondían.
Ford no tardó en acercarse estando preocupado. -¿Te sientes bien? ¿Que pasa? - sentía su propio corazón latir al ver a William en ese estado, coloco una rodilla en el piso para ponerse a su altura y examinarlo mejor sin comprender que es lo que ocurría cuando segundos antes todo marchaba bien.
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Come with me (Reverse Falls) Human Will {FordxWill} {WillFord)
FanficPoder y los secretos del universo. Estás eran las ambiciones de una mente brillante: Stanford Gleeful es un hombre lleno de prestigio que los demás respetaban; serio, frío y calculador que haría todo lo posible por alcanzar sus metas. A pesar de...