Extra 3. (Fiddleford) Fear And Delight

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Fiddleford Hadron McGucket. Corrección, actualmente Fiddleford Hadron Gleeful, la mano derecha del reconocido Stanford Gleeful podía jactarse de ser tan brillante como el, en sus respectivos campos cada uno claramente. Era reconocido en su círculo como su compañero, su confidente, su amante y su esposo.

Desde que se habían conocido en una prestigiosa universidad le había acompañado, fue fiel a sus ideas y lo siguió en todos sus propósitos. Ya era popular cuando lo conocio, después de todo había llegado como un genio incluso en aquella universidad de renombre después de ganar varios concursos de ciencias y con su reciente creación de la máquina del movimiento perpetuo siendo apenas un joven que se iba a graduar de preparatoria no había tardado en llamar la atención de todos.

Todos lo respetaban, todos lo admiraban y querían, todos anhelaban están al lado de Ford y aún así, entre las cientos de personas que deseaban acompañarle lo había elegido a el. Stanford había permitido que el estuviera a su lado.

Era común verlos a ambos siempre y a su pesar Stanford nunca fue una persona afectuosa pero le gustaba pensar que había algo especial entre ellos. Después de todo Gleeful le había vuelto su confidente, le había dicho sus planes y sus ideas por muy descabelladas que sonaran y le hizo feliz saber que confiaba en el. Por eso no le importaba matarse horas creando lo que le pedia, quemándose las retinas buscando la información que le solicitaba y su recompensa llegó cuando vio el anillo en su mano.

Claro, para Fiddleford esa era la prueba absoluta que no había nadie más cercano para Ford que el. Todo el mundo lo sabía, y aún con eso ¿Porque al levantar la mirada de su escritorio veía a alguien más sentado junto a Stanford?

No veía al peliazul como amenaza, claro que no, era inaudito que un ente con cara de mocoso que había llegado hace apenas un año destruyera todo lo que había logrado. ¿Verdad? A Stanford solo le convenía mantenerlo cerca porque tenía conocimiento lejos de la compresión de Stanford y de Fiddleford ¿Verdad?

De manera disimulada Fiddleford veía a su pareja, cada que lo apreciaba quedaba maravillado de ver el aleteo de sus pestañas y su sonrisa perlada. Era una pena que Fiddleford no pudiera ver lo que había detrás de todo eso.

Se supone que Ford le mostraba un párrafo relevante a William y pedia su opinión o sus pensamientos cada tanto solo para obtener otra perspectiva. Sin embargo McGucket noto algo que hizo sentir que su corazón se estrujaba, pues Ford ni siquiera leía junto al peliazul, sino que en su lugar lo miraba atentamente con una pequeña sonrisa. Parecía apreciar las facciones de Will sin que esté se diera cuenta.

Por su parte Fiddleford solo pudo apretar los labios tratando de reprimir sus ideas. Tomando una pila de papeles se levantó y se acercó a Stanford. Algunas veces; justo como en esos momentos;  sentía que Ford y Will  estaban encerrados en una burbuja, donde estaban ambos en su mundo y se sentía a si mismo un intruso cuando no era así. El intruso era ese tonto que ni siquiera pertenecía allí.

—Aqui tienes lo que me pediste Stanford, antes del plazo acordado— sonrió esperando algún elogio o algunas palabras de admiración. El era más útil que William.

—Bien. — Ford apenas y lo miro. Acepto los papeles que de inmediato le dio al peliazul. —Revisalos y dime qué opinas de las fórmulas, si crees que lograremos algo con eso.

—Si señor.— acepto Will cerrando el libro para dejarlo a un lado y empezar a leer los documentos para empezar a señalar algunos puntos. — Creo que aquí debería cambiar la ecuación. Se tendrá más alcance si...

Oficialmente Fiddleford no solo estaba decepcionado por la nula respuesta de Stanford, sino que se sentia ofendido por la forma que trataban su trabajo de días. Solo noto como Ford asentía y aceptaba todo lo que Will le decía.

Come with me (Reverse Falls) Human Will {FordxWill} {WillFord)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora