Charmed: The Bloodline - Temporada 8

6. Bienvenido a la boca del infierno

Ha pasado casi un mes desde que Wyatt y su grupo cayeron en el Infierno de Dante, un lugar oscuro y traicionero lleno de pesadillas y demonios. Con Wyatt, Alex, Lauren, Abigail, Melinda, Penélope Jr., Lucy, Henry Jr., Sebastián, y Sapphire aún atrapados, la situación se ha vuelto desesperada. Sin embargo, la inesperada presencia de Erik, el hermano de Sebastián, les ha dado una nueva esperanza de supervivencia.

En el infierno de Dante

El grupo avanza a través de las vastas y sombrías tierras del infierno, guiados por Erik y sus conocimientos sobre este oscuro reino. Aunque desconfiado, Barbas, el demonio del miedo, se ha ofrecido a ayudarlos a cambio de favores oscuros en el futuro. A pesar de las tensiones, el grupo no tiene otra opción que aceptar la ayuda de aquellos que conocen los secretos más profundos de Dante.

— Si seguimos por este camino, llegaremos a un punto de salida. — Erik avanza con determinación, pero su voz deja entrever el agotamiento tras semanas de lucha. — Barbas nos ha asegurado que este es el camino, pero no podemos confiar en nadie completamente aquí.

Wyatt observa a Erik con desconfianza mientras guía al grupo. — Espero que no estés jugando con nosotros, Erik. Estamos muy cerca de encontrar una salida. Si tienes otra intención... — Wyatt lo deja en el aire, pero todos comprenden el subtexto de su advertencia.

En la mansión Blackthorn, Nueva York

Mientras tanto, Michael Turner Halliwell continúa atrapado en el sótano de la mansión Blackthorn, encerrado por fuerzas que aún no comprende por completo. Los días se mezclan, y la oscuridad del lugar empieza a afectar su mente, dejándolo con preguntas sin respuesta y un creciente sentimiento de desesperación. Adara Blackthorn lo observa desde la distancia, intrigada por su conexión con el linaje Halliwell y su posible utilidad.

— ¿Qué esperas de mí, Adara? — Pregunta Michael desde la celda, su voz ronca después de días de encierro.

— No lo sé... — Responde Adara indecisa mientras se aleja del lugar.

En el hospital, San Francisco

Mientras tanto, en un hospital en el mundo de los vivos, Aria continúa en coma. Su condición no ha cambiado en semanas, y los médicos no pueden prever qué le ocurrirá. En una habitación cercana, Natalie, quien finalmente se ha recuperado, se encuentra con Chris, Paige Jr., y Bianca.

— ¿Estás segura de que estás bien? — Pregunta Chris, apoyándose contra la puerta, observando a Natalie con preocupación.

— Acabas de recuperarte, Natalie, necesitas descansar. —  Interviene Bianca, compartiendo la preocupación de Chris.

— No puedo, vuestra familia está en peligro y debo ayudaros. Necesitáis toda la ayuda posible.  —  Responde Natalie con una calma que desentona con la tensión en la habitación.

Paige Jr., cruzando los brazos, añade en voz baja — Hemos pedido refuerzos. Macy y Maggie llegarán pronto. Deberías centrarte en recuperarte, Natalie.

— Estoy bien, chicos. Puedo ayudar. — Insiste Natalie, decidida a no quedarse de brazos cruzados mientras la familia Halliwell se enfrenta a un peligro inminente.

Chris suspira, sintiendo la presión de la situación. Aunque es reacio a dejar que Natalie se involucre tan rápido, sabe que no pueden permitirse prescindir de ninguna ayuda en este momento.

— Está bien, pero ten cuidado. Las cosas están por ponerse mucho más difíciles. —  Responde finalmente, aceptando la ayuda de Natalie con reservas.

Mientras el grupo de Wyatt lucha por escapar del Infierno de Dante, Chris, Paige Jr., y Bianca deben enfrentarse a nuevas amenazas en la tierra, con aliados como Natalie, Macy, y Maggie uniéndose a la batalla. Michael, por su parte, se encuentra cada vez más atrapado en los oscuros secretos de la familia Blackthorn.