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Al fin era domingo, y eso significaba juntarse otra vez con jaemin, aunque también estaba un poco contento por el cumpleaños de su hermano, pero no planeaba pasar mucho tiempo ahí. Tenía que irse lo más rápido de su casa antes de que llegara renjun y lo interrogara antes de salir como si fuera un policía.

- ma, voy a ir al parque con unos amigos, pero voy a intentar volver antes de que corten la torta - no quería dar mucha información porque su mamá ya sabía a quien se refería cuando decía eso.

- ¿no vas a estar en la tarde? Había invitado a mark y a ren - se metió el menor de la familia.

- dales los saludos por mi parte, hyuck.

- bueno...

- ahora tengo que irme - hizo una media sonrisa - nos vemos en la tarde, los quiero mucho - dijo antes de irse por la puerta principal.

- ¿con quién se fue? Mark va a estar acá y no tiene otros amigos - tenía una gran duda por saber con quien se iba su hermano.

- no lo sé, no me dio muchos detalles.

- te conozco mamá, sé que me estás mintiendo.

- podes pensar lo que quieras - sé dirigió hacia la cocina - mejor deja de maquinar el cerebro en cosas que no son de tu incumbencia y ayúdame con tu torta.

[🌸💫]

El día estaba hermoso, y si bien el sol estaba pegando bastante fuerte como para ser casi inicio de invierno, era soportable.
Todo el viaje de ida jeno estuvo pensando seriamente en que hacer con lo que sentía por jaemin, ya no era algo que pudiera disimular. Y Lo que le pasaba con renjun no era para nada comparable con él, ya no le interesaba salir con él y besarlo no le producía ningún tipo de emoción o sensaciones extrañas como antes.

- ¡nono! - el grito de jaemin derrepente lo sacó de su nube de pensamientos.

Al prestarles atención pudo ver que estaban los tres sentados en un gran mantel con varias cosas dulces para comer, así que rápidamente se dirigió hacia donde estaban para saludarlos con un pequeño beso en la mejilla a todos y guardar asiento a un lado de jaemin.

- no sabía bien que traer, así que hice una torta de chocolate y compré unas galletitas - habló el recién llegado.

- tranqui que jisung se come todo - dijo el chino.

- ¡chenle cállate! Es que las cosas dulces son muy ricas - intentó defenderse.

- que lindo, primer pelea matrimonial - dijo entre risas el pelirrosa, el cual recibió un golpe de chenle por hablar de más - deja de maltratarme estúpido.

- entonces no hables o te mando al frente con ya sabes que cosa - lo amenazó.

- ¿y si mejor empezamos a comer? Jisung dijo que tenía hambre - desvió el tema de conversación.

- ahora cuenten, odio cuando me dejan con la duda - dijo el mayor de todos.

- decile a nana, él tiene muchas ganas de contártelo con lujo de detalle - agregó chenle.

- ¿me pasas una medialuna? - ignoró totalmente lo que había dicho su amigo antes.

- no te hagas el desentendido, los dos sabemos que le querés decir.

- ¿que cosa? - los miró a los dos desconcertado, quería saber a que se referían los otros.

- no es nada - dijo antes de llevar un gran pedazo de la torta de chocolate a su boca para no poder hablar.

- después dicen que somos amigos - se ofendió al notar que no lo iban a contar de que estaban hablando.

- es que primero chenle tiene que hablar bien con jisung - habló una vez que terminó de tragar todo lo que tenía dentro de su boca.

Malas Decisiones » 𝙣𝙤𝙢𝙞𝙣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora