Querido channie ,
Han pasado tres años desde que te escribí aquellas cartas, y mientras me siento aquí, lejos de todo lo que conocía, no puedo evitar recordar cada palabra, cada sentimiento que compartí contigo. He decidido dejar el país, buscando un nuevo comienzo, y me he sumergido en mis especializaciones como veterinario. En este camino, he estado completamente incomunicado, alejado de las voces del pasado, pero cada día ha sido una oportunidad para crecer y aprender, aunque a veces con el peso de tu ausencia como compañía.
La distancia física no ha logrado borrar la huella que dejaste en mi vida. Durante este tiempo, he recibido pocas cartas sobre tu hermano gemelo. A veces, me siento atrapado en una maraña de emociones, preguntándome cómo es posible que el dolor y la nostalgia aún sigan tan presentes. Tres años desde tu muerte, y aunque al principio traté de no caer en la depresión, hubo momentos en que el abismo parecía devorarme. Las noches eran especialmente difíciles, cuando el silencio se hacía ensordecedor y la soledad se transformaba en un monstruo que amenazaba con consumir mi razón. Pero ahora, después de tanto tiempo, he comenzado a entender que puedo estar bien, que es posible seguir adelante sin que tu recuerdo se desvanezca.
Siempre te escribiré, como mi gran y mejor amigo. En cada palabra, en cada carta, seguirás siendo una parte de mí. A menudo me encuentro hablando contigo en mi mente, recordando nuestras risas, nuestras charlas profundas y los momentos que compartimos. Esa conexión sigue viva, aunque esté físicamente ausente. He aprendido que, aunque tu hermano es completamente diferente a ti, hay un espacio para que nuestras vidas se entrelacen de una manera nueva y significativa.
Recuerdo a Wilson, ese gato gordo que te hacía reír, y me doy cuenta de que a veces encuentro consuelo en los felinos que cuido en la clínica. Ellos, de alguna manera, han llenado el vacío que dejaste, incluso si solo es por un instante. Ellos me han enseñado sobre la vida, la resiliencia y la capacidad de amar, incluso en medio del dolor.
A veces, me despierto en medio de la noche, pensando en cómo sería la vida si todavía estuvieras aquí. Imagino las aventuras que habríamos compartido, las risas que aún no hemos tenido, y me duele un poco. Pero también me doy cuenta de que en esta tristeza hay una belleza; la belleza de haber conocido a alguien tan especial como tú. Y aunque la vida nos haya separado, sigo sintiendo esa chispa que dejaste en mí.
Tal vez, algún día, encuentre la fuerza para volver a ser feliz, para darme una oportunidad de amar y ser amado de nuevo. Pero por ahora, seguiré honrando tu memoria y el vínculo que siempre compartiremos. Te llevo conmigo a cada paso, y en cada nuevo amanecer, te prometo que seguiré adelante, llevando tu luz en mi corazón.
Pero hoy, es momento de despedirme de ti. Con estas cartas que nunca llegarán, quiero sellar mis pensamientos, mis recuerdos y mi amor hacia ti. Aunque no puedan cruzar la distancia, sé que siempre estarás aquí, en mi memoria y en mi corazón. Siempre estarás presente en las decisiones que tome y en el camino que elija.
Gracias por todo lo que me diste, por cada rayo de alegría que iluminó mis días. Siempre estarás en mi corazón, y aunque la vida nos haya llevado por caminos diferentes, nunca olvidaré la huella que dejaste en mí.
Con cariño y gratitud eterna,
"Y aunque el tiempo siga su curso y la vida continúe, siempre llevaré tu recuerdo conmigo, en cada latido, en cada suspiro, como un amor eterno que nunca se apaga."
BYUN BAEKHYUN
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FIN
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CARTAS AL CIELO - QUE NUNCA LLEGARON
FanfictionA ti, que fuiste mi sol en días nublados y mi refugio en las tormentas. Estas cartas son mi intento de alcanzar el eco de tu risa y el susurro de tu amor. En cada palabra, guardo un pedazo de ti, una chispa de lo que fuimos. Aunque ya no estés aquí...