A ti, que fuiste mi sol en días nublados y mi refugio en las tormentas. Estas cartas son mi intento de alcanzar el eco de tu risa y el susurro de tu amor. En cada palabra, guardo un pedazo de ti, una chispa de lo que fuimos. Aunque ya no estés aquí...
Escribo esta carta con el corazón pesado y lleno de emociones contradictorias. Hay algo que necesito que sepas, y aunque me duele compartirlo, siento que es lo correcto. La verdad es que soy el hermano gemelo de chanyeol .
Sé que esto puede ser un shock, y no puedo decirte cuánto lamento no haber podido decirte la verdad desde el principio. Nunca fue mi intención ser un dolor más en tu vida, especialmente cuando ya llevas tanto sufrimiento. Pero no pude quedarme callado más tiempo. Ver cómo lidiabas con tus sentimientos hacia mi hermano, cómo te perdías en esos recuerdos que llevas contigo, me ha hecho sentir como si estuviera ocupando un lugar que no me corresponde.
Mi hermano y yo éramos muy diferentes, más allá del físico. Él era un músico, un amante de las fotografías, alguien que se entregaba a un mundo de libertad. Siempre seguía su propio ritmo, explorando la vida con una pasión que yo nunca pude entender del todo. Por otro lado, yo fui un boxeador, alguien que se dedicó a entrenamientos militares desde joven, cargando con la presión de llevar el apellido familiar a los lugares más altos. Mi enfoque siempre fue el deber y la disciplina, mientras que él disfrutaba de la vida a su manera, libre y sin ataduras.
Recuerdo que, a pesar de nuestras diferencias, mi hermano siempre me decía que yo nunca vivía realmente una buena vida. Decía que estaba atrapado en un camino que no era el mío, y me invitaba a buscar mi propia libertad. Pero no lo entendí entonces, y ahora, al mirarte, me doy cuenta de lo que él quería decir. Ahora veo cómo él encontró su vida en la música y la fotografía, mientras yo me perdía en un mundo que, aunque exitoso, no me llenaba.
La razón por la que me acerqué a ti no fue solo por el parecido, sino porque quería entender el vínculo que tenías con él. Quería conocer más sobre la persona que significó tanto para ti, la persona que dejó un vacío imposible de llenar. Me acerqué a ti con la esperanza de encontrar un poco de conexión con mi hermano a través de ti. Pero ahora, al saber lo que estás sintiendo, me doy cuenta de que mi presencia solo ha hecho que las cosas sean más complicadas y dolorosas.
Me duele que mi parecido te haya causado más sufrimiento. Quisiera poder cambiar eso, poder borrar el recuerdo de mi rostro de tu mente y dejarte en paz con tus recuerdos de él. No quise que esto se convirtiera en un juego de espejos, donde cada vez que miraras hacia mí, solo vieras lo que perdiste y no lo que podría ser. Nunca fue mi intención hacerte sentir que podías reemplazar a [Nombre] o que debías lidiar con este dolor.
Sé que es difícil de entender, y no espero que lo comprendas todo de inmediato. Solo quiero que sepas que estoy aquí, pero no quiero ser un recordatorio de lo que has perdido. No quiero que sientas que estoy tratando de ocupar el lugar que él dejó.
Quiero que sepas que soy más que un reflejo de alguien que perdiste. Soy una persona con mis propias historias y luchas. Y aunque estoy profundamente ligado a la memoria de mi hermano, quiero que encuentres tu camino, incluso si eso significa que debemos tomar caminos separados.
Gracias por tu comprensión, y lamento de verdad cualquier dolor que esto haya causado. Espero que podamos encontrar una forma de navegar por esto, juntos o por separado, y que puedas hallar algo de paz en medio de toda esta confusión.
Con sinceridad,
PARK JISUNG
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