Un viejo pergamino olvidado en una cripta secreta de Antigua contiene una profecía sobre el Dragón de ojos dorados. Habla de un tiempo en el futuro, cuando el caos y la guerra una vez más asolen el reino, y los dragones regresen para reclamar su dom...
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Han pasado tres largos y tumultuosos años desde que la alianza entre Corlys Velaryon, Daemon Targaryen y Rhaelya comenzaron a tejerse en las sombras de Driftmark. Tres años en los que la guerra se ha extendido en los Peldaños de Piedra, una serie de pequeñas islas y formaciones rocosas situadas estratégicamente en el mar Angosto. Las batallas han sido cruentas, y la lucha contra Craghas Dahar, también conocido como El Alimentacangrejos , ha puesto a prueba la resistencia de los guerreros de Poniente.
Al principio, el rey Viserys Targaryen había decidido mantenerse neutral, creyendo que el conflicto no representaba una amenaza directa para el reino. Sin embargo, para Corlys Velaryon, señor de la Casa Velaryon y señor de las mareas, y Daemon Targaryen , este conflicto representaba algo más: una oportunidad. Con el apoyo de Rhaelya , que había demostrado ser una estratega astuta y una guerrera feroz, los tres se aliaron en una campaña militar para tomar el control de los Peldaños y expulsar a Craghas y sus hombres.
El conflicto se está extendiendo más de lo previsto. Los Peldaños de Piedra, con sus islotes rocosos, estaban llenos de trampas naturales. La niebla espesa, los terrenos abruptos y los emboscadores enemigos se convirtieron cada victoria en una batalla ganada a duras penas. Los piratas de Craghas usaron tácticas crueles, clavando a sus prisioneros en la arena para ser devorados por los cangrejos al subir la marea, dejando sus cuerpos desmembrados como un recordatorio del terror que gobernaba la región.
Para Daemon y Rhaelya , la guerra no era solo una batalla por el control territorial, sino también un intento de demostrar su valor al reino. La ambición de ambos iba mucho más allá de los Peldaños. Daemon buscaba consolidar su poder fuera de la sombra de su hermano, mientras que Rhaelya, en una alianza aún no oficializada, veía en la guerra una oportunidad de elevar su posición política y militar, mostrando que su sangre Targaryen estaba destinada a la grandeza.
Corlys Velaryon , quien había comprometido su vasta flota y recursos, luchaba también por su legado, sabiendo que si controlaban los Peldaños, sus barcos dominarían el comercio en el Mar Angosto .
Desde el primer día en los Peldaños de Piedra , Rhaelya se había asegurado de estar en el corazón de la lucha, junto a Daemon y Corlys Velaryon . La guerra en esta región estratégica no solo era un conflicto territorial, sino una oportunidad para demostrar su valía y capacidad como líder y guerrilla. No tenía la intención de quedarse en la retaguardia; Había montado en su dragón Meraxes desde el comienzo de la campaña, quemando y destruyendo a los piratas que desafiaban la autoridad de la casa Targaryen.
El suelo de las islas se había tratado de sangre en los últimos tres años, pero los piratas seguían llegando en oleadas. Cada batalla era más intensa que la anterior, y la moral entre los hombres de Corlys y Daemon se encontraba en su punto más bajo. Sin embargo, la presencia de Rhaelya mantenía una chispa de esperanza. Sabían que cuando un dragón se posaba sobre el campo de batalla, la victoria estaba más cerca.
