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Los 6 meses de descanso finalmente terminaron y todas las exorcistas vuelven al primer anillo del cielo, junto con Adam y Eva aún transformada en lute.

Las exorcistas se encuentran más felices y de humor, vacacionar por 6 meses sin duda fue lo mejor para ellas, ahora se sienten con mas energias para el siguiente exterminio.

Mientras que Adam y Eva se encuentran igual de recuperados, estar en el anillo de la paz ayudó mucho a Eva a sentirse mejor, y eso sumando el tiempo que pasó con Adam el cual fue un tiempo de pura relajación, pasión y amor le hizo sentirse muy feliz que le era difícil mantener la fachada de ser lute, alguien fría y seria.

Después de llegar a los cuarteles, las exorcistas irían a sus casas para buscar sus trajes y comenzar el entrenamiento, pues tienen dos semanas antes del día del exterminio.

Mientras que Adam y lute serían teletransportados por Sera para hablar. Al parecer en la oficina, lute se quita el amuleto volviendo hacer Eva, y tanto ella como Adam miran curiosos a Será.

— Adam, Eva, necesito hablar con ustedes de algo importante

— ¿ya aceptaste ser la nueva esposa de Adam? — pregunta Eva, pues aún sigue con la idea de que Adam merece un harem.

— no... — dijo Sera con una mirada inexpresiva.

— mejor cambiemos de tema... Será que es lo que quiere hablar? — pregunta Adam.

— es sobre las armaduras, ya están listas y si se preguntan si son ligeras pues si lo son, ademas de ser muy resistentes incluso pueden resistir al acero angelical.

— perfecto y entonces¿en qué momento las tendremos? — pregunta Eva.

— en 3 horas llegarán al cuartel de los exorcistas, asi que espero que logren acostumbrarse con las armaduras — diría Sera aún sería.

— gracias Sera — dirían al unísono los padres de la humanidad, después Sera crea un portal hacia el cuartel, donde Adam y Eva entran nuevamente.

Después de llegar y de sentarse en la sala principal esperando las armaduras, Adam dirige su mirada a Eva, la cual está sentado a su lado.

— Eva, ¿que fue eso? — pregunto Adam de forma seria viendo a su esposa.

— .... Solo... Quiera que fueras feliz... — diría Eva en un susurró, bastante nerviosa por la mirada de desaprobación de su marido, aunque también un poco excitada por esa intensa mirada.

— yo ya soy feliz contigo

— pero... Mereces mucho, dejaste el paraíso, sacrificaste muchas cosas, aún recuerdo cómo en el inicio de los exterminios, tuviste que matar a varios de nuestros hijos de la primera generación... Sacrificaste tu felicidad... Solo quiero que seas feliz —  termina de responder en voz baja Eva, la tristeza es obvia en sus palabras.

Adam mira por unos momentos a su esposa, aún triste de que ella tenga tan poca autoestima que crea que el no es feliz con solo ella...

Adam se quita la máscara y le quita la máscara a Eva, después la agarra de los hombros, y la mira enfrente,. ella mira a esos bellos ojos dorados y él mira esos hermosos ojos rojos.

— Eva... Yo ya estoy feliz contigo, dejé el eden por ti, te protegí cuando los animales, que antes eran nuestros amigos te atacaron, sacrifiqué muchas cosas por ti, porque te amo, debes entender esto, yo nunca te reemplazaría, porque tú eres todo lo que tengo, créame estoy seguro que si no te tuviera lo más probable es que sería incluso aún más gruñón, cabrón y demás....

Un Pequeño Secreto? más bien un GRAN SECRETODonde viven las historias. Descúbrelo ahora