Cap 14

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Los besos se estaban volviendo más apasionados, sus lenguas bailaban en la boca del otro y solo querían unir sus cuerpo como siempre lo hacían.

Era un día en Australia, casi un mes antes de que volvieran. 

Ese día se habían comprometido y oficialmente, ante la ley de Australia, ya estaban casados. 

-Amor, ¿y si nos volvemos a casar en Corea?  - mencionó el pecoso. Eran casi las tres de la mañana y su momento de pasión ya había pasado. Ahora se encontraban hablando de varias cosas mientras intentaban conciliar el sueño. - Asi Jisung no estaría tan molesto con nosotros - los dos estaban abrazados, sus respiraciones se habían estabilizado y Felix solo sentía los latidos de Hyunjin.

-Me agrada - sonrió dándole un pequeño beso en el sien y agarrando la mano con el anillo que resplandecía - Contigo me casaría todas las veces que quieras - ambos se vieron por un momento - Lix, ¿Por qué no invitamos a tus hermanos? - sintió el cuerpo del omega algo tenso - Tal vez sea bueno contarles todo, ya sabes pasaron muchos años desde que los viste...

-Es verdad...pero no sé si reaccionarán bien, hace como 7 años que no los veo. Desde que estuve en la empresa, ellos parecieron desaparecer de mi vida... - su voz tembló, pensar en sus hermanos le traía muchos recuerdos tanto buenos como malos. Miró directamente a Hyunjin.

-Las personas cambian.

-Sí, pero si me separan de ti, no les perdonaría - negó rotundamente. Sabía que sus hermanos eran así, a pesar de los años no creía que su territorialismo disminuyera. Recordaba que tenía que rogarles para que se pudieran aceptar su relación con San - Igual contigo es más que suficiente, eres mi nueva familia.

Ambos volvieron a unir, no solo sus labios.

Parecía que la noche les quedaba muy corta para todo lo que querían hacer porque sus conversaciones abarcaban sentimientos, acciones y deseos. Sin embargo, lo único que necesitaban era que esten juntos.

PRESENTE

Era el segundo día y Felix aun no despertaba. Por lo que Hyunjin no se despegaba de él ningún minuto, no sentía ni siquiera alguna señal del omega, pero estar a su lado lo hacía sentir más tranquilo.

Sin embargo, sabía que eso también significaba un riesgo.

Habló con el doctor que atendió al pecoso y, aunque también aceptó tomar el riesgo para que Felix despierte, le advirtió a Hyunjin de que podrían esperar un máximo de tres días para que pase eso porque después las complicaciones podrían comenzar.

Cada vez que veía a Felix, sentía que una parte de él se destrozaba, no solo su esposo estaba en peligro, sino también su pequeñito o pequeñita.

Siempre se sentaba a su costado y empezaba a contarle algunas cosas de su día, de su trabajo, quería preguntar, pero sabía que no iba a obtener respuesta. Era difícil, ver al chico con cables en sus brazos y una mascarilla para controlar sus respiraciones, que a veces sentía que eran entrecortadas.

No podía dormir y tampoco quería despertar asustado por pensar que su omega se había ido a una mejor vida.

Tenía que tomar una desición.

-Tengo que ir con Jeongin un momento...- ya eran las dos de la tarde y aun no recibía buenas noticias de Felix - No demoraré, espero - veía los párpados cerrados y las hermosas pecas que decoraban el rostro del chico. Pasó una de sus manos por sus mejillas - Ya vuelvo, amor. Te amo - le dio un pequeño beso en la mano y salió del cuarto.

Quería ir lo más rápido para volver en unas cuantas horas.

Tenía que ir al lugar dónde sucedió todo, por órdenes de la polícia y por pedido de Jeongin.

¿Me Ayudas a Tener un Bebé? - HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora