Te amo, te amo y te amo amor. No me importa decirlo así, ya me pasó la última vez que otro gil lo dijo por mí.
Un universo alterno de Him and I, dónde después de problemas, confusiones y un corazón roto, Mila Vitela y Guido Sardelli pueden estar jun...
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Mila's POV
La luna alumbraba un poco la habitación, dejándome ver a un Guido dormido, abrazado a mí. No sé qué hora era pero aseguraba que estábamos cerca de las tres de la mañana y yo todavía no me podía dormir.
Me sentía estimulada por la cantidad de emociones y pensamientos por los que había estado atravesando los últimos días. Venía arrastrando todas las historietas que circulaban en Twitter desde hace tiempo y sumarle las teorías conspirativas nuevas no me eran de ayuda. Para colmo haber hablado con Guido sobre su pasado me había removido algo, mezclándose con aquella incógnita que me había suscitado el día anterior:
¿Guido me gustaba?
Tenía muchas cosas en las qué pensar, había mucho qué resolver. Muchas actitudes que creí desde naturales hasta incongruentes de parte de mi mejor amigo, ahora tenían sentido, y no solo eso, sino que un nuevo pensamiento se hacía presente.
¿Será que esa tensión que había sentido últimamente existió siempre y yo me daba cuenta ahora?
Me aterraba pensar que mi amigo gustó de mí todo este tiempo y yo nunca lo supe, pero eso era solo una paranoia y no tenía nada confirmado, sumándole lo imposible que esa premisa podía llegar a ser porque... Chicas, yo había salido con su hermano y además nosotros eramos mejores amigos, no había chance. Él tenía treinta y cinco años, posta no había chance alguna de que le gustara una pendeja como yo, con todo lo que le pasó, y menos con todas las veces que me vió siendo una intensa y llorando por Pato.
Pato, Dios. Pato... Tenía que hablar con Pato, tenía que afrontarlo y aceptar que era parte de mi pasado, y que eso no tenía por qué afectarnos. No podíamos vivir sin vernos porque en algún momento nos íbamos a cruzar, y teníamos que dejar la inmadurez de lado.
Qué difícil.
Bueno, pero él tampoco me buscó...
Que se yo, también anduvimos super ocupados, no sé. En las redes sociales se hablaba mucho y eso me estaba consumiendo, me tenía que ir de Twitter urgente, antes que me hiciera mas daño de lo que le estaba permitiendo, y una bola creciente de sentimientos se me atoró en la garganta.
¿Por qué no podía enfocarme en que la semana próxima empezábamos la gira? ¿Por qué no podía tener una vida amorosa y social más tranquila, como mi hermana Mica por ejemplo?
Suspiré despacio y miré a mi lado otra vez. Guido dormía impasible. Su aura desprendía tranquilidad y sus facciones relajadas me daban ternura.
Me atreví a acariciar su mejilla sutilmente y guardarme esa escena en mi cabeza. Era tan bonito verlo descansar. Más sabiendo que en las giras no pegaba un ojo y volvía destruído. Pensé que tenía que disfrutar estos últimos días con él porque estaríamos en un contacto intermitente, al menos los siguientes meses hasta que acomodáramos la agenda otra vez. Por suerte nuestra gira era en el país y no teníamos que estar mucho tiempo fuera, pero el tema es que ellos también tenían sus shows y actividades, y teníamos que encontrarnos el tiempo para coincidir.
