Lee Minho

756 29 0
                                    

|

- Entonces, ¿De nuevo con ese?- Minho preguntó, era evidente su furia o mejor dicho, sus celos.

- Otra vez...- Dijiste entre dientes.

- ¿Disculpa? Últimamente estás muy pegada a él, ¿No crees?- Preguntó sin esperar respuesta de tu parte pero te observaba, te penetraba con esa mirada tan pesada que tenía.

Habían tenido esta discusión recientemente, pero parece que no le queda claro.

- Ya sabes que es mi amigo, parece que no confías en mí, Minho, eres un obsesivo - Dijiste tranquilamente, estabas cansada, no de la salida de la que acababas de llegar, sino de tener que hablar del mismo tema una y otra vez. Gritar y discutir no era lo que querías.

Aunque Minho ahora no estaba gritando, alzaba un poco la voz.

- No intentes voltear la moneda - Dijo mientras iba detrás tuyo, dirigiéndose a la habitación compartida de ambos. - ¡Escúchame!- Al llegar a la puerta, Minho tomó tu brazo para voltearte y quedaron cara a cara.

- No desconfío de ti pero, sabes que él nunca me agradó, te mira con ojos de estúpido y de pervertido - Su tono de voz cambió a uno más suave. Su mano derecha acarició tu mejilla lentamente. - Me preocupa lo que es capaz de hacer, no quiero que te afecte -

- Sí, entiendo, pero podría defenderme o no sé, no tienes que ponerte así...- Dijiste y ambos solo se miraron a los ojos.

- Perdóname princesa...- Te abrazó y puso tu cabeza en su pecho - Déjame recompensarte - Dijo separándose de ti.

No hablaste pero tu expresión transmitía confusión. Minho te llevó al cuarto y te acostó en la cama.

- Cada vez que siento celos, me comporto como un idiota, quiero hacerte sentir bien ahora - Acercó sus labios a los tuyos y se unieron en un lento y apasionado beso. Obviamente no te ibas a oponer a tal propuesta.

Sus manos delineaba tu hermosa figura suavemente, pasaba por tu cadera, luego por tus piernas y subía por tu torso hasta llegar a los hombros.
Su tacto siempre hace temblar tu cuerpo, tu piel se eriza y sientes mariposas en el estómago. Ahora repartía besos largos por tu cuello, dejando ligeras marcas rojas que se desvanecían a los pocos minutos.

- Tienes un cuerpo muy bello - Continuó dejando besos húmedos por tus pechos.

- Me avergüenza Min - Dijiste con las mejillas rojas.

- Ojalá vieras lo que yo veo linda -
Sin más, su lengua rodeó tu pezón, otorgandote placer al instante, su mano bajó por tu torso hasta llegar a tus pantis, jugó con ellos, tirando hacia arriba o hacia abajo.

Ahora tu otro pecho comenzó a recibir la misma atención que el otro, por la mano que se encontraba en tu intimidad, empezó a masajearte en círculos lentamente pero con la suficiente presión.

Tus manos se pasearon por su suave cabello mientras seguía dándote placer.

- ¿Lista?- Preguntó, sacando un preservativo del cajón.

Cuando sentiste con tu cabeza, quitó tu ropa y la de él y comenzó a frotar su miembro contra ti.

Sentiste olas de placer yendo y viniendo, desesperada por más, moviste tu cadera, lo cual él entendió perfectamente. Por fin metió todo su miembro lentamente, te hizo suspirar pesadamente, era gruesa.

Sus embestidas comenzaron lentas y profundas, quería hacerte perder la cabeza con su propio pene.

- A ver, levanta esas piernas linda - Tomó tus piernas y las colocó en sus anchos hombros, lo que le permitía llegar más profundo en ti.

Gemiste un poco alto por la repentina sensación, para Minho, tus gemidos son la melodía más sexy que pueda escuchar, así que aceleró poco a poco el ritmo.

- ¿Escuchas los sonidos que haces bebé? Estás muy mojada para mí - Ahora su miembro podría notarse ligeramente en tu vientre, ese bulto que sobresalía de vez en cuando.

Minho tomó tu mano y la puso sobre tu vientre. - ¿Sientes? Eso es lo que te gusta eh - Tus jadeos y gemidos dejaban tus labios cada vez con más frecuencia.

- Min, no aguanto más...- Estabas por llegar a tu punto máximo, las palabras de él son muy estimulantes.

- Déjame ayudarte bebé - Ahora su mano se encontraba sobre tu clítoris, masajeando de arriba a abajo o de un lado al otro, intercalando movimientos y presión.

Soltaste un largo gemido mientras te corrías sobre su miembro, alcanzando una parte de su pelvis.

Minho gruñó ante la vista y se corrió justo después de ti.

Cuidadosamente salió de ti, tiró el preservativo y los limpio a ambos.

- ¿Te sientes bien? Te traeré agua - Iba a ponerse de pie pero le tomaste del brazo.

- Quédate conmigo hasta que duerma, ¿Sí?- No podías evitar cerrar los ojos y cuando menos lo esperaban, ya estabas profundamente dormida.

Ambos estaban acurrucados en la cama, Minho te abrazó tiernamente y dejó un beso sobre tu cabeza.

- Mm mi bebé...- Finalmente cayó en brazos de morfeo junto contigo.

|

Borrador que tenía de otro libro jejeje

Tengo pensado en hacer un Alfabeto con cada miembro.

Lamento que suelo hacer más escritos sobre Min y Chan, es que son mis bias ok

Que tengan linda noche bbs

Pensamientos | Stray Kids SmutDonde viven las historias. Descúbrelo ahora