! Capitulo 22

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La música seguía resonando a través del departamento de Mikey, llenando el aire de risas y conversaciones animadas

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La música seguía resonando a través del departamento de Mikey, llenando el aire de risas y conversaciones animadas.

La atmósfera festiva contrastaba profundamente con la lucha interna de la menor de los Donovan.

Sintiendo la presión acumulándose, decidió que necesitaba un respiro.

Con un vaso de whisky en la mano, se dirigió a la terraza del edificio, buscando un momento de tranquilidad.

La brisa nocturna era refrescante, y ella inhaló profundamente, disfrutando del silencio momentáneo.

Con el cigarrillo entre los dedos, encendió la punta y dejó que el humo se escapara, sintiendo cómo la nicotina ayudaba a despejar su mente, aunque solo fuera un poco.

Sin embargo, no estaba sola. Desde la sombra, Izana apareció, con su característica expresión seria pero intrigante.

Se acercó lentamente, observando cómo la chica fumaba con una mezcla de admiración y preocupación.

—¿Tú también necesitas aire fresco? —preguntó Izana, su voz tranquila.

Ella giró la cabeza, sorprendida de verlo allí.

—No es exactamente un lugar tranquilo para estar.—dijo, exhalando el humo hacia un lado.

—A veces, es en los lugares más ruidosos donde uno más necesita escapar. —respondió Izana, con una sonrisa que no llegó a sus ojos.

Ella se rió, un sonido ligero que se perdió en el viento.

—No puedo discutir eso. Este lugar se siente... complicado.

Izana se apoyó en la barandilla, mirándola fijamente.

—¿Alguna vez has pensado en escapar? —preguntó de repente, su tono volviéndose serio.

_____ lo miró, algo confundida por la pregunta. El alcohol había enturbiado su juicio, y el efecto del whisky la hacía sentir más valiente.

—¿Escapar? ¿A dónde?—respondió, riendo levemente—. No creo que haya un lugar en el mundo que me reciba después de todo este caos.

Izana dio un paso más cerca, su mirada intensa atrapando su atención.

—Podríamos irnos lejos. A otro país, donde nadie nos conozca. Podríamos empezar de nuevo.

Ella sintió un hormigueo en el estómago. La idea era tentadora, como un sueño en el que nunca había tenido la oportunidad de creer.

—¿En serio?—preguntó, su tono un poco más serio—. ¿A dónde?

—A cualquier parte. Solo tú y yo. Sin el peso de las familias, sin el pasado.—dijo Izana, y ella notó la sinceridad en su voz.

Las palabras de Izana resonaron en su mente. Una vida nueva, lejos de las presiones y responsabilidades, parecía un sueño irrealizable, pero ahora, justo en este momento, parecía posible.

—¿Y qué pasaría con mi familia? —preguntó, aún dudando.

—No lo sé. Pero, ¿realmente crees que ser parte de todo esto te hará feliz?—respondió Izana, con un gesto que indicaba el edificio—. Solo te traerá más dolor.

La chica sintió un nudo en el estómago, pero el alcohol la empujaba a dejarse llevar.

—Supongo que siempre he querido escapar. Entonces, ¿por qué no? —dijo, sin pensar realmente en las consecuencias.

Izana sonrió, como si hubiera conseguido lo que quería. Pero en su mente, había un plan más oscuro en marcha.

En un movimiento ágil, sacó un pequeño dispositivo de su bolsillo y activó un mecanismo oculto.

"Cuando el destino se presenta, se aprovecha", pensó Izana.

Un ruido sordo resonó en el fondo, pero ella no lo escuchó, absorta en sus pensamientos.

Al momento siguiente, una explosión sacudió el edificio, iluminando el cielo nocturno con un destello ardiente.

El último piso, donde la fiesta aún se celebraba, estalló en llamas, y el sonido de la destrucción llenó el aire.

El caos se desató. Gritos de terror y confusión resonaron mientras los invitados intentaban escapar.

_____ se sintió empujada hacia atrás por la onda expansiva, su corazón latiendo con fuerza ante la magnitud de lo que acababa de suceder.

—¡Izana! ¿Qué has hecho?!—gritó ______, al darse cuenta de la gravedad de la situación.

Él la miró con frialdad.

—Esto es solo el principio.—dijo con una sonrisa fría, antes de girarse y desaparecer en la oscuridad.

______ se quedó paralizada, sin saber qué hacer. En su mente, las imágenes de su familia y amigos siendo atrapados en el fuego comenzaron a invadirla. El horror la envolvió.

Mientras tanto, en el primer piso del edificio, Adirael,Azkeel, Alabám,Abaddon y Astaroth comenzaron a moverse con rapidez.

Al escuchar la explosión, sus corazones se hundieron. Habían perdido a su padre, y ahora estaban en medio de otro desastre.

La preocupación por la menor de los Donovan y el caos que rodeaba a la fiesta les llenó de ira.

—¡¿Qué ha pasado?! —gritó Adirael, mientras corrían hacia las escaleras.

—¡Es una explosión! Debemos encontrarla!—respondió Azkeel, intentando calmar su creciente desesperación.

Alabám miró a su hermano, su voz grave.

—Izana. Es él. Tiene que estar detrás de esto.

—¡No podemos permitir que se salga con la suya!—gritó Abaddon, su rostro lleno de furia—. Debemos encontrar a la menor y detenerlo.

Astaroth,siempre el más calmado, trató de tomar el control de la situación.

—Separémonos. Revisen cada piso. No podemos permitir que escape.

Los hermanos comenzaron a buscar en el caos, sabiendo que cada segundo contaba. El tiempo se volvía cada vez más escaso mientras el edificio ardía.

Mientras tanto, la menor de los Donovan, aún paralizada por el shock, sintió que el tiempo se detenía.

¿Había realmente aceptado escapar con Izana?

Se dio cuenta de que se encontraba en medio de un juego mortal, y el futuro que había imaginado se desmoronaba ante sus ojos.

Debía encontrar una manera de salir de esta pesadilla, antes de que fuera demasiado tarde.

El sonido de los gritos y el caos a su alrededor se intensificó, y en su corazón, la determinación empezó a resurgir.

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❝𝗜𝗻𝗲𝘀𝘁𝗮𝗯𝗹𝗲❞ 【Izana Kurokawa】-Yandere-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora