Wildest Dreams [Omegaverse KookV]

XXXIX

O casi, pues con la boda a la vuelta de la esquina, era difícil estar tranquilo, los días transcurrieron con pruebas de comida, de pastel, de decoraciones hasta el día en que Taehyung tendría su vestido listo, la última vez que se lo probaría antes de la boda y el omega quería que todo estuviera perfecto. El sol salió y el futuro señor Jeon estaba por toda la habitación de arriba para abajo, arreglándose y tratando de dejar todo en orden.

-Tranquilo, cuidaré de los niños mientras tú terminas la prueba de vestido y después iremos a ver a la vidente. -dijo Jungkook acariciando sus hombros en un intento por tranquilizarlo. - Te verás precioso y todo saldrá perfecto. -Aseguró el alfa dejando un besito en sus hombros.

Taehyung suspiró y colocó una de sus manos sobre la de Jungkook. -Gracias, amor.- dijo con una sonrisa antes de darle un besito en los labios, en cuanto terminó de vestirse se aseguró de que sus cachorros estuvieran cómodos para ayudar un poco a su alfa y que no despertarán los dos al mismo tiempo. Se despidió de ellos y salió de la habitación.

Por suerte, las mujeres de la casa de costura encargadas de su vestido habían tenido el gesto de llevárselo hasta su hogar y lo esperaban en una de las habitaciones junto a su madre y Jimin. Ellos también estaban emocionados por la boda.

Lo que Taehyung no esperaba era que justo ese día el vestido le quedará más grande y eso desatara aún más nervios en él.

-No se preocupe, Joven Kim, es normal que antes de la boda pasen estas cosas.- dijo una de las mujeres tratando de tranquilizarlo.

-Así es, hijo, además, no había pasado mucho tiempo desde que diste a luz a Kai cuando te lo probaste, tu cuerpo aún está cambiando.- dijo su madre.

Taehyung juntó los labios en una expresión de pena y observó a Jimin. -¿A ti también te pasó esto?

-Sí, fue horrible. Pensé que no estaría listo, pero sólo era mi mente jugándome sucio. -respondió su amigo con calma. - Tu vestido está en manos de expertas, relájate. Todo saldrá perfecto, estoy seguro.

Taehyung asintió aunque la situación lo hizo sentir un poco mal, recibió muchas palabras de los omegas a su alrededor pero sus nervios le estaban ganando. Cuando la prueba terminó y los omegas del palacio despidieron a las costureras Taehyung regresó hacia su habitación con menos ánimos que antes. Al entrar se encontró a su alfa jugando con ambos pequeños. -¿Me tardé mucho?- preguntó con una media sonrisa.

-Nos acabamos de despertar. -Respondió el alfa, traía el cabello revuelto, señal de que él también se había dormido con sus hijos. -¿Cómo te fue, mi amor? -preguntó emocionado.

-Bien.- vaciló un poco el omega desviando la mirada. -El vestido aún no está listo, tienen que hacerle un par de arreglos porque no me queda como antes.

Jungkook sabía lo abrumado que estaba su omega y no quería decir algo que lo hiciera preocuparse más así que le sonrió dulcemente antes de hablar. -¿Quién le manda a mi prometido tener un cuerpo de infarto? -preguntó coquetamente. - Estará listo para antes de la boda, las costureras tienen órdenes de enfocarse únicamente en eso. Tu madre vendrá a cuidar a los niños mientras vamos con la vidente, ¿Te parece si nos apuramos y así no piensas más en eso?

Una media sonrisa se formó en los labios de Taehyung y asintió, unos minutos después su madre llegó para cuidar a los pequeños y luego de dejar todo listo la pareja al fin salió del palacio para abordar uno de los carruajes que los llevarían. Hasta ese momento fue que Taehyung se dio cuenta que en realidad no había preguntado a dónde irían exactamente, era obvio que no era en el pueblo por el rumbo que tomaron pero tampoco cerca del palacio. -¿Crees que tardemos mucho?- preguntó a su alfa.