Cap. 5

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El sol de la tarde brillaba suavemente a través de las ventanas del hospital, proyectando sombras sobre las paredes blancas. En la habitación, el sonido rítmico del monitor cardíaco de Tn llenaba el silencio. Kamiya estaba allí, sentada en la silla junto a la cama de Tn, observando su rostro aún inmóvil.....

Desde el incidente con los recuerdos borrosos y el fuerte dolor de cabeza de Tn, Kamiya había decidido no moverse ni un segundo más de su lado. No podía arriesgarse a que algo como aquello volviera a pasar sin ella cerca para ayudarlo. Aunque los doctores habían asegurado que estos episodios eran señales de recuperación, que los recuerdos estaban tratando de regresar, no era suficiente para Kamiya. Cada vez que Tn se movía ligeramente, su corazón se aceleraba, esperando que fuera el momento en que abriera los ojos y la recordara.....

Kamiya: Tn... sigues luchando, ¿verdad? *Murmuró en voz baja, sin dejar de mirarlo*

Habían pasado días, y aunque no había más episodios de dolor o recuerdos borrosos, la frustración comenzaba a acumularse en su pecho

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Habían pasado días, y aunque no había más episodios de dolor o recuerdos borrosos, la frustración comenzaba a acumularse en su pecho. Los momentos en que sus ojos se encontraban no eran más que breves destellos de confusión. Él no la veía como lo hacía antes. Y eso dolía........

Sostuvo con fuerza el peluche de gato que había ganado en la feria, el mismo que le había mostrado a Tn cuando ocurrió aquel primer destello de recuerdos. En ese momento, sintió que había esperanza, que quizás estaba más cerca de lo que pensaba. Pero ahora, todo se sentía tan distante otra vez.....

El doctor había pasado esa mañana para revisar los signos vitales de Tn, asegurando que su recuperación física estaba avanzando bien, pero que la memoria era algo que podía tomar mucho más tiempo. "Debes tener paciencia", le había dicho el doctor, pero Kamiya sabía que eso era lo más difícil de hacer.....

De repente, una pequeña tos débil llamó su atención. Tn movió ligeramente los dedos de la mano que reposaba sobre la cama. Kamiya se levantó rápidamente de la silla, acercándose a su rostro.....

Kamiya: Tn...

Sus ojos se abrieron lentamente, desorientados como siempre. Kamiya contuvo el aliento, esperando que esta vez hubiera un destello de reconocimiento. Sin embargo, como las veces anteriores, Tn solo la miró con una expresión vacía, como si tratara de juntar piezas que no encajaban.....

Tn: Tú... eres... *Su voz era débil y rasposa, como si las palabras lucharan por salir*

Kamiya: *Apretando el peluche contra su pecho, con el corazón en la garganta* Sí, soy yo... Kamiya. Soy Kamiya.

 Soy Kamiya

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Ecos de un Pasado OlvidadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora