#8.5

12 3 3
                                    


─ No, no puede ser. Necesita descansar más.

─ ¡Apártate!

─ ¡Si sigue así, realmente morirá! Incluso el curandero dijo que tenía que descansar.

─ ¡He dicho que te quites!

─ La herida del cuello se ha vuelto a abrir. Si sigue exigiendo tanto a su cuerpo, no lo soportará. Además, ahora tiene herida también la muñeca. Por favor, se lo ruego, hoy no puede ser.

El guerrero, con una expresión aburrida e impaciente, pateó a Pupa en el estómago. Con un golpe sordo, Pupa cayó al suelo en un rincón de la tienda, lanzando una mirada angustiada hacia Eugene, quien yacía en el suelo como un cadáver, exhalando respiraciones superficiales. Pupa se aferró con todas sus fuerzas al tobillo del guerrero.

─ Es, es un niño cuya muñeca estuvo a punto de ser cortada. Mírelo, ¿de acuerdo? La herida del cuello se ha vuelto a abrir. Y hace unos días, debido al líder, incluso estaba sangrando por abajo. El curandero también dijo que si sigue así, realmente morirá. Por favor, déjelo descansar, al menos hoy.

Tessa: ... ¿...qué?😨

─ Entonces, ¿por qué no se comporta? ¿Qué importa si el puto sangra un poco por detrás?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

─ Entonces, ¿por qué no se comporta? ¿Qué importa si el puto sangra un poco por detrás?

─ Por favor, si lo arrastran ahora, morirá.

─ Mejor así. ¿Hay alguien aquí que no sepa que ese imbécil quiere morir? Si hasta se cortó la muñeca él mismo.

─ Solo un día más. Por favor, déjelo descansar solo un día más. ¿Sí?

─ ¡Oye, sácalo!

El guerrero que estaba en la puerta se acercó a grandes zancadas hacia Eugene. El aspecto de Eugene, que yacía en el suelo, era tan terrible que hacía que cualquiera frunciera el ceño al verlo.

El cuello, la muñeca y el pecho estaban cubiertos con vendajes mal ajustados, y manchas de sangre fresca se mezclaban con otras más secas. Sus labios estaban pálidos, y realmente parecía estar al borde de la muerte. Pero llevarlo ante el líder era su tarea, así que el guerrero lo agarró por el cuello de la camisa y lo arrastró hacia afuera.

─ ¡Suelta a Eugene! ¡No puedes hacerlo! ¡Déjalo!

─ Ja, maldición... ¿hasta cuándo vas a seguir con esto?

No había piedad en las palizas que daban los guerreros. Para ellos, Eugene no era más que el juguete del líder, y Pupa, una persona común de la aldea, no significaba nada para ellos.

🌄 ─── ◦ 🧡 ◦ ───🌄

🌄 ─── ◦ 🧡 ◦ ───🌄

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
CADonde viven las historias. Descúbrelo ahora