DIECINUEVE

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↳᯽⸙͎✪ Damian ✪⸙͎᯽↲

Aún no entiendo como Jon, a quien he conocido toda la vida, terminó teniendo una faceta de la que no era consciente.

Si, es atractivo, no estoy ciego. Pero que lo sepa y se aproveche de eso para ponerme nervioso y acorralarme… No esperaba este desenlace cuando dijo que él iba conquistarme.

Me lleva constantemente a lugares, usualmente no me preguntan, solo me lleva, y sé que debería sentirme molesto, pero Jon conoce tan bien mis horarios y lo que me gusta, que todos los factores están a su favor.

Sin contar que yo hacía algo parecido cuando aún éramos "súper sons".

Y bueno, puede que me gusten sus "sorpresas", que en este punto, ya me hacen esperar ansioso para la próxima vez. Solo para saber a dónde me llevará ahora, o que hará para que yo esté cómodo.

El lugar al que usualmente me llevaba es esta cafetería pequeña y minimalista con muchas plantas. El primer lugar al que me llevó sin preguntar.

Lo cierto es que los postres eran bastante agradables al paladar, el servicio al cliente era agradable y una vez cada tanto entraba un gato al local a comer, porque al dueño le gustaban y les dejaba comida.

Me cuesta creer aún que un lugar así esté en Ghotam, pero no me quejo.

Estar sentada aquí era relajante, y hablar con Jon sobre cualquier cosa no era tan incómodo como pensé que sería.

Pero mientras el kryptoniano se levantó a buscar nuestros pedidos, el chillido de una ardilla me hizo girar a ver a la venta, y allí estaba ella, viéndome con sus demasiado llamativos ojos azules.

Disimuladamente ví que tan lejos estaba Jon, pero él seguía en la barra. Por supuesto, eso me distrajo lo suficiente como para que ella se acercara y tocara mis cosas.

Sacó un libro de mitología griega que había comprado para una actividad estúpida, y pasó rápidamente las páginas hasta llegar a la que quería mostrarme.

Leí tranquilamente cuando se detuvo y me señaló con la pata el título de un dios.

Ares, dios de la guerra y fuerza bruta.

No supe que significaba, pero no pude preguntar que quería decirme, ya que Jon había llegado con las bebidas y postres, sentándose frente a mí. Por supuesto, no tuve que ver para saber que ella ya se había esfumado.

— ¿Alguna tarea? —preguntó Kent cuando vió el libro abierto. Negué con la cabeza—

— solo… curiosidad, supongo —divagué sin darle importancia—

— ¿Es un dios? —preguntó cuando cerré el libro y tomé mi bebida—

— Dios de la guerra, Ares —expliqué—

Resultó extraño como, por un breve momento, pareció recordar algo que lo puso nervioso.

Lo miré con el seño fruncido

— ¿Qué?

— nada importante —sonrió jugando con la pajilla de su jugo—

— Jon —mi tono hostil lo hizo removerse en su silla—

— es una estupidez, no es gran cosa —dijo intentando cambiar el rumbo de la conversación— Por cierto ¿Kori y Dick ya…?

— Jonathan Samuel Kent Lane —lo detuve— sacar a colación la ruptura de mi hermano no va a hacerme olvidar el tema —lo señalé— y si estás tan ansioso por desvíar mi atención, significa que me estás ocultando algo.

Me miró como un cachorro desconcertado, pero al final miró a otro lado para hablar.

— … es sobre una ex —murmuró— pero no quiero hablarte de eso y no es nada importante.

— yo juzgaré si es importante o no, Jonathan. —me crucé de brazos, esperando que terminara de hablar, porque necesitaba descubrir ese estúpido tema que le recuerda a una ex estando conmigo— habla.

Abrió y cerró la boca varias veces antes de terminar cediendo, revolviendo su cabello con frustración.

— está bien —suspiró— ella estudiaba una rama donde se vé la mitología griega. Y solía decir que yo era su… bueno, me llamaba Ares.

— ¿Y? —insistí, más intrigado que molesto—

Jon es musculoso, pero no tendría porque comprarlo con un Dios violento.

Él respiró profundamente.

— tengo entendido que también simboliza la fuerza bruta y… eh, virilidad masculina —explicó suavemente, mientras me miraba con la cabeza gacha—

Me quedé en blanco.

¿Fuerza bruta y virilidad masculina?

— te dije que era una estupidez —dijo nervioso cuando yo me quedé callado— no es nada importante, además, seguro solo exageró.

Iba a decirle algo, probablemente nisiquiera podía decir algo lúcido, pero mi teléfono comenzó a sonar con insistencia, lo que rompió el ambiente.

Cuando revisé, una considerable cantidad de mensajes de Tim me hicieron levantarme del asiento, en pánico por lo que leía.

— tengo que irme —dije guardando mis cosas—

— ¿Pasó algo?

Lo ví un momento, él parecía entender que algo no iba bien, pero yo me debatía entre decirle o no. Pero al final negué con la cabeza.

— reunión familiar.

— ¿Te llevo? —preguntó con tono pasivo, pero me negué— de acuerdo, Dami. Ve con cuidado —sonrió—

Quise quedarme y decirle todo, explicarle que estaba pasando, pero no podía decirle mis suposiciones, porque no teníamos evidencia.

No esperé que él se levantara y me apretara entre sus brazos, pero me aferré a su pecho, sin querer admitir que lo necesitaba.

— eres increíble, Dami —murmuró Jon— lo que sea que te moleste, vas a solucionarlo.

Quise burlarme de su cursilería, pero solo cerré los ojos y respiré el olor de su ropa, dejando que mi corazón acelere todo lo que quisiera.

Solo por esta vez dejaría que Jon sepa que lo estaba haciendo bien.

—Confesión Tardía—

Problemas familiares, nada nuevo en la batifamilia… ¿Verdad?

Podría decir un montón de motivos válidos de porque tardé más de lo usual en actualizar, y también podría explicar porque no voy a estar tan activa en las próximas semanas, pero… prefiero no decirlo :)

Cuando vuelva espero traer un capitulo más largo, supongo. Solo espero que las circunstancias estén a mi favor.

❄️~

Confesión Tardía | Jondami |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora