Capítulo XI - Una familia en desastre

7 4 0
                                    

Zelle seguía sentado mirando a Blark esperando una explicación sobre todo lo que ha hecho estos años.

—Trataré de explicar todo esto desde el inicio, aunque seguramente terminará en un completo enredo.

—Adelante, pondré todo mi esfuerzo para prestarte atención.

Felis también prestaba atención a todo.

—Muy bien. Seguramente recuerdas ese día cuando Faris nació, en ese día tenías unos quince años de edad, fue cuando aparecí gracias al reloj de arena teniendo treinta y tres años y me llevé a Faris a este punto del tiempo.

—En ese proceso fue cuando te encontré, estaba muy confundide cuando me dijiste que eras Bless, porque en realidad eres mi hermano menor por unos dos años. Traté de buscar a Bless, mi hermano menor, pero no se encontraba por ninguna parte; solo estabas tú diciendo que eras Bless del futuro. Incluso cuando ya te habías ido, el Bless que yo conocía no se encontraba por ninguna parte.

—Por favor, llámame Blark. Te había explicado en aquel entonces que es imposible la existencia repetida de la materia a través del tiempo, por lo que no existiría otro Blark, porque solo yo soy Blark.

—Eso sigue siendo confuso para mí.

—En el tiempo que estuve contigo ahí, te expliqué el terrible destino que llegarían a sufrir Faris y el resto si se quedaban ahí en esa casa, tuve que intervenir haciendo un viaje de veinte años para llegar a Faris recién nacida y volver a un viaje del mismo largo de vuelta junto con ella hasta aquí, que es el tiempo al cual yo pertenezco. En conclusión, Faris está en un tiempo veinte años adelantado a su época original.

—¿Por qué era necesario viajar tanto? ¿No tuviste el reloj todo este tiempo?

—Tuve que esperar hasta la edad de treinta y tres años, porque antes de eso no había logrado modificar los niveles de radiación que generaba la máquina. Antes, con solo un par de años de viaje se causaban mutaciones severas en tu cuerpo, pero ahora las mutaciones son bastante leves, permitiendo viajes más extensos. Aunque en mi caso, el viaje que hice bastó para dejar mi cuerpo a como es ahora. No me atrevería a realizar otro viaje de esa magnitud, mucho menos con Faris a bordo.

—¿Y qué me dices del viaje de regreso? Podrías simplemente haber ido pocos años hacia el futuro en lugar de volver a tu época original.

—Quise alejarla de su época tanto como mi cuerpo soportara el viaje, pero al tener en cuenta que Faris también se vería afectada, solo viajé hasta aquí para protegerla de la radiación.

—En ese entonces fue que me explicaste que mis hermanes y yo íbamos a morir en un futuro y que solo ibas a llevarte a Faris contigo, pasé varios días sintiendo un enorme peso de conciencia sobre lo que debería hacer a continuación, era le únique que sabía sobre lo que se aproximaba en unos años, y al final lo hice; usé mi habilidad en mis hermanes para mantenerles a salvo dentro de mi composición neuronal y escaparía de ese lugar para siempre sin saber si lograría sobrevivir afuera. Quería escapar de todo eso que me culpaba y amenazaba, así que muy pronto usé mi habilidad para que les otres usaran mi cuerpo en lugar de mí y entonces ya no tendría conciencia de nada.

Zelle miraba al vacío con una expresión totalmente seria sintiéndose extraviade. Blark no sabía qué hacer, pero continuó con el tema.

—Entonces sí sobrevivieron gracias a mi llegada que tomaste esas decisiones. ¿Conoces a Celia?

—¿Quién?

—La psiquiatra que los acompaña todo el tiempo.

—No sé quién es, llevo tantos años sin saber lo que ha ocurrido a mi alrededor.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 11 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

FarisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora