⊹⊣ ¡Sᴇᴀᴍᴏs ᴀᴍɪɢᴏs! ⊢⊹ [Duxino]

▫𝑇𝑒𝑛𝑒𝑟▫

Marzo.

Hora de volver a clases otra vez.

Diego estaba realmente emocionado por volver al colegio.

—¡Joven Diego! Es hora de levan-

Lucía ni siquiera pudo terminar de preguntar cuando el castaño abrió la puerta, mirándola con una sonrisa y ya completamente vestido con el uniforme de pies a cabeza.

—Buenos días, Lucía. Estoy listo.

La mucama se quedó mirándolo con confusión mientras el oji miel corría bajando por las escaleras. Y cuando entró a la cocina poco después, se sorprendió al encontrarlo ya sentado en la mesa, con su vaso de jugo y sus sándwiches igual que todos los días.

—Veo que ya está comiendo.

Diego asintió rápidamente mientras masticaba.

—No quiero llegar tarde. —Dijo en cuánto tuvo la boca libre por un momento, antes de volver a concentrarse en comer su desayuno.

Lucía rio suavemente y tomó asiento al lado del castaño mientras suspiraba.

—Joven Diego, aún falta casi media hora para la hora de entrada.

Diego se encogió de hombros y pasó los trozos de sándwich que tenía en la boca para poder contestar.

—Igual, quiero estar listo.

Unos diez minutos después, el oji miel ya se encontraba en el auto junto a la mucama, en camino hacia el colegio.

Diego movía sus piernas de un lado a otro con ansiedad, preguntándose una y otra vez que le esperaría éste año...

Ojalá pueda hacer más amigos.

Al pensar en eso, no pudo evitar que el rostro del azabache apareciera también en su mente, haciéndolo sonrojarse levemente.

Esperaba que su amistad con Duxo siguiera igual o incluso mejor (si eso era posible) que el año pasado. Y sabía que para eso tendría que seguir pagándole al oji lila, pero realmente aquello nunca le había importado demasiado y no lo haría ahora tampoco.

Porque, en el fondo, Diego quería creer que Duxo disfrutaba su amistad y compañía tanto como lo hacía él.