Sonic
El tiempo ha sido extraño.
Seguí enfermo otra semana más, durante ese tiempo Shadow se quedó. Siempre estaba pendiente de mí, preguntándome si quería algo o sí necesitaba algo.
Me daba mis medicinas a tiempo y siempre me preparaba comida, en esos momentos al comer, siempre ponía una manta en mi espalda para que no sintiera frío.
Incluso cuando necesitaba dormir, me leía libros hasta descansar.
Fue bastante atento, e incluso se me hizo raro, ya que nunca recibí este tipo de atención.
Gracias a su ayuda logré mejorar.
El otoño ya estaba más que presente. Él tenía un enorme patio por lo que aproveché esa situación. Pero antes de ir a salir a disfrutar de la estación, Shadow me detuvo, y empezó a abrigarme, es decir, me pusó una bufanda y unos guantes, solo para asegurarse de que no tenga una recaída.
Su expresión era la misma. Pero su forma de actuar me hacía pensar en otra cosa.
Lo que hizo en todo este transcurso se me hizo bastante tierno, incluyendo que llegaba a sonrojarme.
Cuando salí al patio fue perfecto para pensar sobre mis sentimientos.
Empecé a tener un ligero cariño por Shadow, así también tenia uno con el tipo de las cartas.
Empecé a razonar, y sí el tipo es algún mal tipo. O... no se, no lo conozco, pero pensar en la forma que me escribe me hace sonrojar.
Pero también estaba Shadow, que a pesar de estar enfermo, me ayudó bastante y me cuidó. Algo que nadie hizo en mi vida.
Pensé que solo era amable. Pero aquella vez en la que me acompañó apesar de que quería estar solo y permitió que llorará en su pecho. Hacía que mi corazón bombeara fuerte.
Estoy confundido, y ya no siquiera se como me siento, solo quiero aclarar mis dudas, pero no se por donde empezar.
Fue cuando una hoja de un árbol cayó cerca de mi nariz. Decidí que para distraerme, lo mejor seria si reunía todas las hojas y me tiraba en ellas.
En la casa de mis padres nunca llegaba esa estación, no nevaba y eso. Por ende nunca viví la experiencia de saltar sobre un montón de hojas. Pero de niño siempre quise.
Vi un pequeño cobertizo y pues, fui a ver si tenía una sopladora o un rastrillo. Lo bueno es que no había seguro, por lo que el acceso se me hizo fácil.
Encontré un rastrillo y salí, empecé a recojer cada hoja que había caído.
Su patio era enorme y sabía que habría un montón de hojas que recojer.
Podía sentir como mi niño interior sonreía por lo que estaba haciendo y estaba emocionado por saltar.
Tarde un rato, si. Pero cuando ya tenía en un montón sonreí.
Decidí quitarme la bufanda, ya que sentía que me iba a asfixiar. Lo pusé cerca en caso de querer volver adentro.
Tomé distancia del montón, y corrí, di un salto y rápidamente me hundí.
La caída ni se sintió. Era como si las mismas hojas sirvieran para amortiguar la caída. Sonreí y reí.
Salí del montón de hojas y volví a reunir todas, incluso las recién caídas, y seguí saltando, no solo haciéndome feliz, si que también hacía feliz al niño interior que siempre soñó hacer esto.
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•One Shots• Volumen II
FanfictionVOLUMEN II •ONE SHOTS •Contenido Sonadow/Shadonic •Contenido algo explícito en algunas escenas. (Lenguaje y acciones). •Portada de mi autoría. •No hacer copias, ni adaptaciones si mi autorización. •Si no te gusta este tipo de contenido, por favor no...