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15. emma's pov
Valen me dio una sonrisa nerviosa, lo que me causó muchísima ternura de su parte, parecía un nene chiquito.
Estábamos en el estudio, en donde acostumbraba a grabar sus temas, hace unos minutos se había ido Facu, luego de saludarme muy efusivamente, comentándome cuanto me había extrañado, y lo emocionado que estaba por la juntada de la noche, la cual, como siempre, sería en su casa.
Ya extrañaba a los chicos, un mes sin verlos era muchísimo tiempo, más si acostumbrábamos a vernos muy seguido.
—¿Ya estás lista?— la voz de Valen me distrajo, y vi como acomodaba la guitarra en sus piernas.
—¿Vos estas listo?—pregunté burlona al verlo tan nervioso y soltó una risa por lo bajo.
—Si— asintió con la cabeza y comenzó a rasgar las cuerdas de la guitarra, formando la melodía que lo había escuchado tararear hace dos días en el baño de su casa.
Escuché atentamente en cuánto su voz rasposa comenzó a cantar, no era la primera vez que escuchaba como Valentín me cantaba o a los chicos, pero esta vez se sentía diferente, como si fuera más intimo y estuviera desenvolviéndose, rompiendo esa coraza que tenía.
"Se vuelve tan valioso el beso de la calma El peso de las almas y su abrazo ansioso Enlazadas entre sí en el borde de la cama..."
Sonreí al recordar esa noche en el sur, en donde hablamos de aquello, me parecía increíble la capacidad que tenía Valen para recordar todo y transformarlo en arte.
"Entre humo y otra reflexión barata No oculto mis temores porque solo me delatan"
Escuchar solo el inicio de la canción, era como volver en el tiempo, y situarme nuevamente en esa noche, en donde si ahora miraba hacía atrás, había comenzado todo, ese día se rompió ese hielo que ninguno de los dos se atrevía a cruzar.
La letra tenía mucho para hacerme pensar, un poco hacer una reflexión, que sentía que Valen tenía ese poder en la gente, y aún más cuando era algo tan de nosotros lo que cantaba.
Y cuando estaba logrando encontrar el sentido de sus palabras, llego a una parte de la canción que me dejo la mente en blanco, logrando que simplemente lo mire con una sonrisa embobada.
"Ya entendí por qué gusto de lo cálido Es que pensar en vos es como acercarse al fuego..."
Y el decía que no era romántico, pero aún así, recordaba la gran mayoría de palabras que nos dijimos esa noche.
Me ahorré en decir todos los comentarios, hasta que llegó al final de la canción, lo cual supe cuando dejó de rasgar las cuerdas de la guitarra, y conectó su mirada con la mía, notando un rastro de timidez en esta.
