VIII

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            SERAS MIO COMO SEA

Desde un principio sabia que detras de todo eso estaba él, pero aun no superaba el desagrado que sentia al verlo, era como si comiera algo amargo que le hacia arder la garganta y al mismo tiempo le removia el estomago, en pocas palabras era desagradable.

- Bienvenido cariño - le dijo poniendose en pie

- ¡No me llames asi! - contesto con enfado

- Vamos, no te enfades y mejor sientate - le dijo apartando la silla

- No es necesario que hagas algo asi, ¡no me trates como si fuera una mujer! - dijo molesto negandose a sentarse

- Solo lo hago por cortesia no tienes porque enfadarte

- ¡Entonces no hagas cosas que me enfaden!

- Esta bien, ¡sientate donde quieras pero hazlo ya! - dijo perdiendo la paciencia

- ¿Donde quiera? - pregunto mientras una sonrisa burlona se dibujaba en su rostro y miraba a otro lugar

- No lejos de mi - asevero con una mirada seria y fastidiada

Naruto resoplo y se sento frente a él sin disimular su hastio, se hizo un silencio incomodo, los segundos    pasaban y ninguno decia nada, la mirada del rubio se perdia en el paisaje de la ciudad atraves de la ventana, Sasuke hacia lo mismo dejando que lo invadiera un sentimiento de tranquilidad, hasta que....escucho un sonido molesto, eran los dedos del rubio que golpeaban la mesa.

- ¡Quieres dejar de hacer eso!...me molesta - se quejo con enojo

- Si tanto te molesta deberias dejar que me vaya - contesto desafiante

- Te quedaras hasta que cenemos - le dijo empezando a enfurecerse - Veo que el traje te quedo bien - añadio mas calmado

- Si...no es de mi gusto pero no me dejaron opcion, asi que tuve que ponermelo - dijo para molestarlo

- Si no te gusta, pudiste haber venido desnudo eso habria sido mas interesante - contesto sonriendo maliciosamente

- Maldito pervertido - penso frunciendo el seño sin contestarle nada no hiba a dejar que lo provocara

Al cabo de unos minutos les trajeron la cena que constaba de un delicioso rodaballo asado con vinagreta de almejas, el cual acompañaron con un vino blanco de cosecha añeja, comieron en silencio tan solo el ruido de los cubiertos mezclada con las dulces melodias del piano se escuchaba en el lugar, para Naruto esto fue agradable ya que no queria hablar con Sasuke, pero esa paz no duraria por siempre y fue interrumpida precisamente por el moreno.

- Sabias que las almejas son afrodisiacas - dijo tan de repente que descoloco al rubio quien abrio los ojos enormemente y por poco se atora con la comida

- Y se supone que eso deberia importarme o lo dices porque a ti te hace falta - respondio cortante reponiendose de la sorpresa inicial

Sasuke fruncio el seño por lo que dijo pero no hiba a darle el gusto de provocarlo e iniciar una pelea asi que con todo el aplomo que le caracterizaba contesto con toda tranquilidad.

- Si dudas sobre mi hombria puedo demostrarte de lo que puedo ser capaz

- No...no es...necesario - dijo sonrojado bebiendo un sorbo de vino - ¡Maldito Uchiha! - lo maldijo en sus adentros

La cena continuo con su ritmo habitual hasta que fue terminada por completo, tras unos minutos de reposo, Naruto se puso en pie con intencion de irse.

- A donde vas - pregunto Sasuke mas serio de lo usual

Viviendo Entre SombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora