𝑺𝒕𝒂𝒓𝒈𝒊𝒓𝒍 | 𝑱𝒆𝒏𝒍𝒊𝒔𝒂 | (𝑮!𝑷)

Capítulo 20

—¿Quién se cree esa idiota que es? ¿Y por qué diablos me agarraste? ¡Ya iba a agarrar a esa perra!

El hombre paseaba furioso de arriba abajo, su cuerpo estaba furioso. Sus manos se apretaron cuando presionó su mandíbula con fuerza.

—¿Viste eso?—Golpeó sus puños contra la mesa—. Primero Jennie dice que está con alguien, ahora esto... ¡Ya ni siquiera lo disfrazan!

Namjoo solo miró a su amigo. Lo observó por unos segundos, haciéndole darse cuenta de cuán lleno de odio estaba Kai.

—Kai... Creo que deberías calmarte. ¿Te das cuenta de lo que hiciste?

Sus ojos llenos de odio se fijaron en Namjoo y su mandíbula se tensó.

—Debería haber...

—¡No deberías haber hecho nada!—gritó, interrumpiendo al hombre—. Kai, si ella te acusa de agresión física, ¡tu carrera podría arruinarse!

Unos segundos después, hubo un silencio. Kai no dijo nada por un largo momento.

—¡No lo entiendes!

—¿Qué yo no entiendo? Jennie rompió contigo hace semanas, pero eres el único que parece no poder aceptar eso—dijo Namjoo comenzando a irritarse por las estúpidas actitudes de su amigo.

Kai se quedó mirándolo, sus fosas nasales se dilataron y sus ojos oscuros se volvieron negros y tormentosos.

—¿Qué crees que debería hacer entonces? ¿Fingir que no están juntas y que Jennie no me ha buscado en todo este tiempo?—Sacó el resto de su ira con las palabras.

—¿Qué tal si te olvidas de esta chica? ¡Te las arreglaste para arruinar mi noche con tu maldita obsesión enferma con Kim!

Kai respiró irritado y cerró los ojos, sacudiendo la cabeza.

—Jennie puede ser una perra, pero es inteligente, esta situación puede volverse contra ti en un abrir y cerrar de ojos.—Namjoo se acercó a Kai y con ambas manos se apoyó sobre sus hombros—. Tienes que aprender a controlarte, ¡eres la estrella del equipo! En los próximos juegos, las gradas estarán llenas de reclutadores, ¡debes controlarte si no quieres que esa chica te acuse por toda la mierda que estás haciendo!

—¡No puedo quedarme tranquilo por esa perra!

—Si quieres vengarte, no puede ser así.—Kai miró a Namjoo y dejó que su mirada indignada dejara al descubierto un sentimiento de curiosidad.

—¿Entonces, cómo?—preguntó con el ceño fruncido.

—Tengo una idea, pero para eso necesito que te concentres en los juegos en el futuro. Ningún equipo quiere que un jugador, mariscal de campo, tenga informes de agresión física contra una mujer.

***

—¿Realmente vas a estar en silencio el resto de la noche?—Jennie habló tan pronto como las dos entraron al departamento de Lisa—. ¿Puedes hablar conmigo?

—No tenemos nada de qué hablar, Jennie—dijo mientras ponía la llave del auto en el llavero. Su tono era seco, casi recortado.

—Tenemos mucho de qué hablar, Lisa.

—Dime, ¿dónde tienes la cabeza para estar a solas con Kai? ¡Te dije que no era seguro hablar con él!—Levantó la voz, dejando a Jennie un poco sorprendida y asustada.

—¡Solo quería resolver toda esta situación sin involucrarte!

—¡Felicidades, empeoraste la situación con tu terquedad!—Se enfureció. Jennie tragó saliva, mirando sus ojos mieles que ahora estaban más oscuros. Jennie caminó hacia el lado opuesto, dejando espacio para Lisa. Se dirigió hacia la puerta de la habitación más grande y apoyó la frente contra ella.