Carl Grimes fanfic

Capítulo 8: Granero

Madi se había quedado dormida en la silla mientras se aseguraba que Dylan estaba bien.

- Madi despierta - dijo Judith sacudiéndola con cuidado - vete a la cama, llevas toda la noche aquí. No me quiero imaginar lo rota que estará tu espalda.

Madi se despertó lentamente.

- ¿Qué hora es? - preguntó Madi aún dormida.

- Serán al rededor de las 8 de la mañana, ¿por qué? - preguntó Judith.

- Es muy tarde Judith, ¿como no me habéis despertado antes? - preguntó Madi.

- Tenías que descansar - dijo Judith - mi hermano a dicho que te puedes tumbar en su cama mientras él trabaja en algo.

Se quedaron en silencio.

- Yo te diría que fueras a dormir, y si no haz algo productivo, te vendría bien despejar la mente - dijo Judith - y de tu hermano no te preocupes, lo puedo cuidar yo.

Madi le sonrió y salió de la habitación.

Fue directa al bosque, necesitaba despejarse un poco en el medioambiente.

Se sentó entre dos troncos que había tirados en el suelo.

Sacó su cuchillo y empezó a escribir su nombre.

- ¿Madi? - preguntó alguien, era Carl - ¿qué haces aquí?

- Necesitaba despejarme - dijo Madi y no apartó la mirada del tronco.

- ¿Qué tal está Dylan? - preguntó Carl.

- Bien, supongo - dijo ella terminando de escribir su nombre en el tronco.

Se quedaron un rato en silencio.

De pronto empezaron a escuchar unos sonidos cerca.

- Caminantes... - dijo Madi en bajo cuando alzó la cabeza para mirar hacia todas las direcciones.

Carl levantó su arma y Madi sacó su cuchillo.

- Ahí - señaló Madi y comenzaron a atacar - son demasiados.

- Ven - dijo Carl y la agarró de la mano para ir a un sitio seguro.

Vieron un árbol con un agujero y se metieron dentro.

Pasaron todos los caminantes y Carl y Madi se miraron.

Carl le tocó la mano a Madi suavemente y se fueron acercando cada vez más.

Carl besó su mejilla con mucha dulzura, y se fue acercando cada vez más a la boca de Madi con pequeños besos.

Al llegar a su boca empezaron a besarse, era un beso lento y suave.

De pronto Carl se separó.

- Yo... no quiero que te sientas incómoda - dijo él nervioso - se por lo que has pasado y... no quiero arruinar nuestra amistad.

- No Carl no pasa nad... -

- Será mejor que nos vayamos - dijo Carl interrumpiendo a Madi y saliendo del árbol.

Madi suspiró y tomaron caminos distintos para que la vuelta no fuera incómoda.

Llegaron a la granja y Carl entró para ayudar a Shane a reponer balas.