Capítulo 14: Pequeño cerdito

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Carl empezó a buscarla por toda la casa y no la encontraba.

- Mierda... - dijo en voz baja empezando a preocuparse.

Decidió salir de casa y buscar por las calles.

De pronto giró la vista hacia las puertas de Alexandria, y ahí estaba, escalando.

- ¡Madi! - exclamó Carl acercándose a ella - ¿dónde vas?

Madi lo miró y lo ignoró, volviendo a subir.

- Madi... - dijo Carl al ver que no le hacía caso. Hizo una pausa y continuó - ¿estás así por lo de Enid?...

- Tu qué crees - dijo mientras subía.

- ¿Puedes bajar? No es lo que piensas - dijo Carl - por favor, te vas a hacer daño.

- No me importa - dijo.

De pronto, mientras Madi subía la pierna, el cacho de metal en el que apoyaba el pie se hundió, haciendo que cayese.

Carl estiró sus brazos y la cogió al vuelo.

- Te tengo... - dijo Carl.

Madi se quedó un rato en sus brazos, pero cuando se dio cuenta reaccionó y se soltó.

- Oye, se lo que crees haber visto con Enid, pero no ha sido así - dijo Carl.

- Mira, no sé porque me enamoro en pleno apocalipsis donde unas personas muertas que se deshacen con lo más mínimo me quieren comer - dijo Madi - así que tampoco estoy como para que me engañen en esta situación por la que estamos sobreviviendo.

Madi se giró y empezó a escalar de nuevo.

- Madi - la llamo Carl y esta no respondió - ¿y Dylan?

Madi se frenó sin mirarle.

- Lo extrañaré, pero llevarlo allí fuera sería como matarlo - dijo Madi - adiós Carl.

Madi termino de subir el muro, le hizo una seña a Carl con las manos refiriéndose a una despedida, pero Carl tenía la esperanza de que Madi se diese la vuelta y le dijera que se quedaría allí con el, pero no sucedió.

Carl volvió melancólico a su casa, entró al cuarto y vio a Judith.

- ¿La has encontrado? - preguntó Judith - ¿dónde está?

- Judith - dijo Carl mirándola serio - olvídala...

Judith se sorprendió hacia aquellas palabras.

- ¿Se va? - dijo empezando a ponerse nerviosa - ¿y Dylan? Pero va sola, ¿y si la muerden?

Carl no contestaba, se estaba metiendo en la cama.

- ¡Carl tienes que hacer algo! - exclamó Judith.

- Lo he intentado, pero es inútil - dijo Carl aguantando las ganas de llorar - y si se lo prohíbo hará algo peor que salir de Alexandria...

Judith se había enterado hace poco de lo que Madi se hacía, por lo tanto no contestó.

- Entonces no la volveré a ver... - dijo Judith recapacitando - no te preocupes, hablo yo mañana con Dylan, ¿te parece?. Tu olvida este tema, me encargo yo.

Carl se dio la vuelta en la cama e intentó dormir.

🤠🧟‍♀️

Carl se despertó, no estaba seguro de que lo que sucedió la noche anterior era real o no, así que al levantarse fue directo a la habitación de Madi.

- ¿Madi?... - preguntó entrando, pero como ya suponía, no había nadie allí.

Vio salir del cuarto de Judith a Dylan.

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