Carl Grimes fanfic

Capítulo 18: Ventana

- ¿Sigues vivo?... - preguntó Madi - pero, si...

- ¿Se te hace raro verme vivo? ¿Hermanita? - dijo Cedric riendo.

Judith miró a Dylan.

- Tu, lo soñaste... - dijo en bajo y Dylan asintió.

Judith empezó a juntar la información que le dijo Dylan. Si él ya acertó sabiendo que su hermano estaba vivo, ¿acertará también con qué matara a Dylan?

- ¿Cómo? - preguntó Madi.

Cedric río.

- Sencillo - dijo Cedric - quedé en coma por mucho tiempo, al despertar, no había nadie a mi lado, tan solo mi madre, que estaba muerta.

- ¿Solo ella? - preguntó Madi - ¿y mi padre?

- Aquí - dijo el hombre que estaba detrás suyo.

Había cambiado tanto que no lo reconocía.

- Papá... - dijo Madi y le entraron ganas de llorar.

- Nos abandonaste - dijo su padre.

- No, no - dijo Madi - yo no hice eso, yo...

- No me importa, ya no hay vueltas atrás - dijo su padre.

Negan sonrió.

- ¿Te ha gustado la sorpresa, Madi? - dijo Negan - yo ya advertí que no iba a ser muy agradable.

Negan dobló su espalda y volvió a levantar su bate.

- Bien, hoy os daré la opción - dijo Negan - puedo matar a uno de vosotros - dijo mirando a Dylan - o simplemente puedo hacer a uno de los vuestros de los míos, ¿lo entendéis?

- Hijo de puta... - dijo Maggie - no haremos eso.

- ¿No? - dijo Negan - ¿ellos son como tus hijos no? - dijo señalando a Madi, Judith Carl y Dylan - bien, pues ya te quedaste sin marido, no te quedes sin hijos también.

Maggie apretó los dientes por la rabia.

- Me ofrezco voluntario - dijo Eugene.

Negan lo miró serio.

- ¿Tú? - preguntó - ¿y qué me podrías aportar tú?

- Tengo un coeficiente intelectual más alto que el resto de la población - dijo Eugene - mi gran capacidad para procesar la información a gran velocidad es notable, por lo tanto podría ayudarte a variadas cosas, como por ejemplo, fabricación de balas.

- ¿Sabes hacer balas? - preguntó Negan.

- Si - dijo Eugene - necesitas aleación de plomo, pólvora de simple base, latón, acero, aluminio...

- Cállate - dijo Negan - te creo.

Negan bajo su bate.

- Bien, el trato es justo, os habéis librado, esta vez - dijo Negan - pero a la siguiente que os vea rondando por aquí, no dudaré en mataros.

Maggie miró con asco a Negan y este guiñó un ojo.

- Jeremy - dijo Negan mirando al padre de Madi - ¿quieres agarrar a Eugene y llevarlo a la fábrica? Debemos empezar ya a construir esas balas.

Jeremy asintió.

- Vamos pelos largos - dijo Jeremy agarrándolo - a partir de ahora eres Negan, ¿entendido?

Eugene asintió nervioso.

Todos se levantaron y se dieron la vuelta.

- Eh, chaval - lo llamo Negan - esto es tuyo.