Please Don't...

Capitulo 9

Y así pasaron los días,nuestra relación de amistad habría vuelto, luego de un par de charlas todos se normalizo. Ji-Hyun no tuvo problemas,Minho no tuvo problemas y yo no tuve problemas. Es como si todos nosotros hubiéramos fingido que nada había pasado. En el trabajo todo fluía bien entre nosotros. Y con Yuna cada día avanzaba un poco más con ella.
  Tal vez sería mejor así para todos,fingir demencia y seguir adelante.

— Entonces hoy iremos a la playa y volveremos mañana a la noche. ¿Vamos a acampar ahí o iremos a un hotel?. — pregunto Yuna guardando las guarniciónes de comida que llevaríamos a la playa.

—Veremos como está ahí....si hay muchos insectos talvez mejor un hotel,pero por ahora si no sucede nada acamparemos — le contesté

Eran las 6 de la mañana y a las 8 debíamos estar en la playa,ahí nos estarían esperando Minho y su esposa Ji-Hyun.

— Me alegra que vayamos todos juntos. Y que por fin Ji-Hyun y Minho dejaron de pelear. Aparte también estoy feliz por qué tú y Minho volvieron a estar normales. Antes de sentia un aire horrible entre ustedes dos. Otro día tendrás que contarme bien que sucedió....— Comento ella

— Sí, fue un alivio que las cosas volvieran a la normalidad —respondí, mientras buscaba la mochila donde guardábamos nuestras cosas. No podía evitar sonreír ante el recuerdo de aquellas charlas que nos habían permitido dejar atrás la tensión. Sin embargo, también había un pequeño nudo en mi estómago; el hecho de que Ji-Hyun y Minho estuvieran juntos, aunque era bueno para todos, me hacía sentir algo extraño. Pero eso era solo un pensamiento pasajero. Debía concentrarme en disfrutar del día.

Yuna comenzó a revisar la lista de cosas que llevábamos. Era meticulosa con esos detalles, lo que siempre admiré de ella. Mientras la observaba, pensé en cómo me había ayudado a dejar atrás mis inseguridades. Había una energía positiva en nuestra relación, algo que había estado ausente antes de que todo se complicara.

— Oye, ¿y qué tal si hacemos una fogata en la playa? —sugirió Yuna de repente, su mirada iluminándose con la idea—. Me encantaría asar malvaviscos y contar historias de miedo.

— Eso suena genial —respondí, sintiendo que la emoción comenzaba a crecer dentro de mí. Hacía tiempo que no pasábamos un rato divertido juntos, y esta sería una oportunidad perfecta para relajarnos.

El reloj marcaba las 7:15. Teníamos que salir pronto, así que terminé de recoger mis cosas y nos dirigimos a la puerta. Mientras caminábamos hacia el auto, no pude evitar sentir que este viaje era una nueva oportunidad para todos nosotros.

— Espero que no llueva —murmuré, recordando un viaje anterior que se arruinó por un aguacero inesperado.

— ¡Ay, no! No digas eso. —Yuna me dio un ligero empujón—. ¡Hoy todo saldrá perfecto!

Me reí y subí al auto, sintiendo que, aunque aún había cosas sin resolver, estábamos en un buen camino. Al llegar a la playa, el aire salado me dio la bienvenida, y el sonido de las olas rompía suavemente contra la orilla. Minho y Ji-Hyun nos estaban esperando, y al ver sus sonrisas, supe que estábamos listos para dejar atrás el pasado y disfrutar del presente.

— ¡Hola, chicos! —gritó Minho mientras se acercaba, su energía contagiosa haciéndome olvidar cualquier preocupación.

— ¡Hola! —respondí, sintiéndome un poco más ligero. Mientras nos abrazábamos, noté que la química entre ellos parecía estar en su punto más alto. Me alegré por ellos, incluso si eso significaba un pequeño sacrificio para mí.

— Bueno, ¿están listos para disfrutar? —preguntó Ji-Hyun, su mirada radiante iluminando su rostro.

— Totalmente listos —respondí, sintiendo que hoy podría ser un nuevo comienzo, un día donde podríamos ser solo amigos, dejando las complicaciones a un lado. Después de todo, fingir demencia parecía ser la mejor forma de seguir adelante, al menos por ahora.