𝐕𝐈𝐈

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Solo corría, no sabía a donde iba, pero corría con las pocas fuerzas. Hasta que encontró un pequeño lago en ese tenebroso bosque, así que decidió sentarse allí, para pensar todo lo que estaba pasando.

No podía creer que la persona que había amado todo este tiempo, fuera la causante de que lo golpearan así.

Se quedó allí sentado viendo el lago, abrazo sus piernas y apoyó su cabeza entre ellas, para luego volver a llorar. ¿Cuando se le acabarían las lágrimas?

Si fuera por el, se tiraría del lago. No aguantaba más, no quería seguir viviendo así, pero habían cosas que lo detenían.

Era de noche, claramente se encontraba solo (salvó, Alastor que intentaba encontrarlo) pero, de pronto, se escuchó un ruido que asustó al de ojos azules.

Era un pequeño pato ¿De noche?

El miro confundido a la criatura, y aún más cuando sta se estaba acercando. ¿Acaso no le tenía miedo? Al ver al animal tan cerca, se le quedó mirando unos segundos, para luego acariciar su pelaje.

Era suave y muy limpio por lo visto. De alguna manera hizo que Lucifer se sienta más calmado al sentir como tenían una rara, pero buena, conexión.

todo era tranquilo, sentia mucha paz sintiendo el tacto de la criatura, pero de pronto algo paso.

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Buscaba desesperadamente a su amigo, casi novio. Ya le había mandado un mensaje a sus amigos, pero no había conexión, así que no les llegó. Por lo que solo optó por buscar el solo.

Su estrés aumentaba debido a la preocupación, no sabía que decirle luego, pero lo único que quería lograr era encontrarlo.

Pero no sólo por preocupación, era que se generaba ese estrés, sino que también era por la ira que le generaba todo lo que tuvo que pasar Lucifer y la culpa que sentía debido a un micrófono.

De tanto correr había quedado exhausto, estaba tan cansado que se tiró al suelo e intentó regular su respiración. Hasta que, por fin, se largo a llorar luego de no haberlo hecho durante muchos años.

Recordaba que la única vez que lloró fue cuando su cruel padre había abandonado a su madre y al castaño.

Estaba realmente triste y arrepentido de todo. Sus lágrimas aumentaban y solo quería volver a ver al pequeño rubio que lo había cautivado.

El castaño estaba dispuesto a quedarse allí, pero escucho un sonido y luego vio un destello de luz. Como si fuera ¿Magia?

No lo pensó dos veces para ir directo hacia allá, pensando que podría haber rastros de Lucifer.

El de ojos azules estaba impresionado por lo que veía, observaba cómo el pequeño pato soltaba destellos de luces y generaba un brillo que hacia que el rubio sonriera, haciendo como si toda su tristeza desapareciera

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El de ojos azules estaba impresionado por lo que veía, observaba cómo el pequeño pato soltaba destellos de luces y generaba un brillo que hacia que el rubio sonriera, haciendo como si toda su tristeza desapareciera.

Estaba asombrado, cuando de pronto la criatura se fue debido a un ruido de una rama. Era Alastor.

No sabía cómo reaccionar, pero simplemente se levantó y lo abrazo, llorando, dijo;

-" ¡Lo siento tanto, Alastor! ¡Soy un puto monstruo! ¡Tu no tienes la culpa de nadaaa!"- dijo en llantos.

-"Tranquilo, tranquilo. No te preocupes, Luci"- dijo Alastor con alivio por haberlo encontrado.

Alastor acarició el cabello del rubio y se sentaron en el pasto, mientras los dos se encontraban abrazados, y Lucifer llorando.

El rubio se sentía aliviado, pero con tristeza.

Estaba aferrado al castaño mientras intentaba calmar el llanto, pero de pronto sintió unos dedos en su barbilla, obligándolo a mirarlo a los ojos.

Acto seguido Alastor acerco su rostro a la cara de Lucifer. Se podía sentir la respiración quebrada del de ojos azules. Para luego besarlo suavemente en los labios y acariciaba la nuca del contrario.

El rubio pudo calmarse un poco y, al rato quedo dormido en el pecho del moreno. Así que Alastor lo cargo y fueron de nuevo a su casa, aunque le llevó varias horas encontrarla.

Acostó a Lucifer en un lado de su cama y luego acostó el, de lado suyo. Para sus, dormir tranquilamente abrazados. Sin preocupaciones..

¡Pum! Sonido de una puerta golpeada ¿Acaso le entraron a robar? Rápidamente se levantó y vió a Niffty, Ángel, Husk y Pentius.

-"¿¡Que pasó con Luci!?"- preguntó Niffty desesperada.

-"Tranquilos, el ahora está durmiendo en mi cuarto"- dijo mirando hacia otro lado con un leve sonrojo.

-"Tu y el.. "- Dijo Husk con una sonrisa.

-"Si."- Niffty y Pentius abrazaron a Alastor, felices por la noticia.

-"¿Asi que, te cogiste a Lulu?"- dijo Ángel con una mirada pícara.

-"¡Que! ¡No! "- exclamó Alastor.

-"Bueno, pero ahora, salgan de mi casa. Y si no me arreglan esa puerta juro que nunca más les hago los proyectos"-

Todos asistieron y se fueron riendo y felices por el noviazgo de ellos dos. Habían intentado mil formas de emparejarlos, pero la que funcionó fue la de que se tenía que escapar e ir a un bosque.

Al final Alastor se fue a dormir, volviendo con Lucifer.

¡PUM! na mentira.

No se que decir, chau

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No se que decir, chau

𝐎𝘫𝘰𝘴 𝐀𝘻𝘶𝘭𝘦𝘴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora