✰𝕋𝕙𝕖 𝕊𝕥𝕒𝕣𝕤 𝔻𝕠𝕟'𝕥 𝕊𝕙𝕚𝕟𝕖✰ || ℙ𝕒𝕦𝕝 𝕃𝕒𝕙𝕠𝕥𝕖||

5. Pesadilla

Los Cullen nos habían invitado a jugar béisbol, Edward pasaría por nosotros y aprovecharía para presentarse con Charlie.

Yo seguía sin recibir un solo mensaje de Jake, me sentía triste, desde que vino a casa no me ha hablado.

—Papá, saldremos con Edward, está afuera, quiere presentarse oficialmente— la voz de Bella me saco de mis pensamientos.

—Que pase— hablo papá mientras terminaba de hacerle el mantenimiento a su escopeta.

—Solo...se amable con el, es importante— pidió Bella.

Edward paso y se presentó con Charlie.

—Iremos a jugar béisbol, yo las cuidare— aseguró Edward.

Salimos de casa subiendo a la Jeep que había tratado el chico, emprendimos camino al claro en el que jugarían.

Cuando llegamos, ya estaban los demás listos, me aparte de Bella y Edward dejándolos a solas.

—Ey, pero miren quien esta aquí— exclamó Emmett con entusiasmo.

—Hola— salude a todos.

—Los estábamos esperando— hablo Rosalie.

Todos comenzaron a jugar, el ruido del bate chocando con la pelota se asemejaba al de un trueno, ahora comprendía porque habían elegido un día más gris de lo normal en Forks.

De pronto el dolor de cabeza llegó a mi ser, me sentía ansiosa viendo a todos jugar, el dolor paso por un momento.

Trate de concentrarme en ver el juego, pero eso no funcionó por mucho tiempo, me encontraba sentada en un tronco cuando sentí recibir un golpe invisible en el estómago, el aire se hizo presente y con él se reprodujo la pesadilla que había tenido hace algunas noches.

Sentía mi cuerpo temblar ligeramente, la pesadilla ya no era borrosa, veía y escuchaba todo con claridad, lo que había soñado estaba a punto de suceder.

Cuando por fin logre reaccionar Rosalie estaba frente a mi.

—Nix, ¿Estas bien?— me sentía completamente débil, como si hubiese corrido por horas y estuviese deshidratada.

—¡Paren!— grito Alice.

—¿Que pasa?— pregunto Carlisle.

—Un grupo de nómadas, ya se iban pero nos olieron, vienen para acá— Edward tomo a Bella y se puso frente a ella, algo malo estaba por pasar.

—¿Cuanto tiempo?— volvió a hablar el patriarca.

—No mucho, tal vez 5 minutos— Rosalie me tomo de las manos levantándome con facilidad

La rubia hizo la misma acción que Edward con Bella, se puso frente a mi y junto a ella se posicionó Emmett.

—Toma, ponte esto— Emmett me tendió una gorra y con una velocidad inhumana fue hacía la Jeep sacando una enorme sudadera.

Hice caso a sus órdenes, sin muchas fuerzas me puse la sudadera y la gorra.

De entre los árboles salieron tres figuras, venían caminando hacia nosotros, cuando pude distinguirlos sentí mi corazón dejar de latir.

—Está pelota debe ser tuya— dijo el moreno lanzando la pelota a Carlisle.

—Gracias— respondió el líder del clan.

—Me llamo Laurent, ellos son Victoria— una pelirroja muy hermosa, pero tenebrosa— Y James— el rubio, cuando logre verlo desde detrás de Rosalie un miedo indescriptible me invadió, mi sangre se heló y el dolor de cabeza regresó.