Capítulo 21 °Solo ven la verdad°

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 NAYA EVANS:

No puedo dejar de pensar en Jared y sienna no ayudo mucho ayer cuando me dijo que él estaba mal.

Pero solo es hoy y después voy a hablar con él.

-Naya...

Sabía que iba a querer hablar.

-¿Qué quieres?-pregunto sin darme la vuelta.

No puedo verlo.

-Que me digas que paso.

-Tú sabes qué paso.

-No, la verdad es que no entiendo una mierda.

Que se lo diga no va a cambiar las cosas, solo que maya deje de creer que gano. O tal vez podamos ocultarlo.

Me doy vuelta y antes de que pudiera decir algo la veo de reojo, nos está mirando.

Es una señal, no puedo decirle.

-Naya...

-No quiero hablar contigo...

-Necesito que me digas que paso ¿Hice algo mal? ¿Paso algo con tu familia?

-Solo déjame...

Y no me detiene.

Lo odio.

Odio tener que ignorar su presencia, fingir que no existe.
...
Sienna:Voy de camino a tu casa.

Yo:ya terminaron mis clases, también estoy yendo.

Sienna:¿Hablaste con tu papá?

Yo:Sí, nos vamos a encontrar en la cafetería de mi abuela en una hora.

Sienna:¿tu mamá?

Yo:hoy no trabaja, tuvo que ir a Seattle a hacer unos trámites.

Sienna: mejor nos encontramos en la cafetería.

Yo:bien.

Sienna:👍🏼

-Naya.

Me doy vuelta para ver a Paul.

-¿Qué pasa?

-¿Qué pasa? Bueno, pasan muchas cosas.

-Si quieres hablar sobre Jared, no tengo nada para decir.

-¿Qué pasa contigo?

-Nada.

-Sé que algo estás haciendo y sé que sienna te está ayudando, sea lo que sea, podemos ayudarte.

Hay no...

-No pasa nada.

-Si no quieres hablar con él, yo puedo hacerlo.

-Gracias, pero de verdad no pasa nada.

-No me lo digas, pero sé que pasa algo.

-¿Vas a insistir?-pregunto.

-¿Si lo hago vas a decirme?

Sí.

-No.

-Entonces, no. Pero recuerda que no puedes estar lejos de Jared mucho tiempo, por la imprimación.

-Lo recuerdo.
...
Sienna está sentada o más bien recostada sobre una silla en otra mesa, literalmente apuntando con su celular a la mesa donde estoy sentada. Pero parece que está viendo algo, es su celular y no le importa nada.

Papá no tarda más que unos minutos después de la hora acortada en llegar.

-Me sorprende que llamaras-dice sentándose frente a mí.

-tengo que pedirte algo.

-¿Dinero?

-No

-¿Qué?

-Te hagas que ana y maya nos dejen en paz, especialmente a mamá.

-Si lo hago se van a enojar y se ponen muy insoportables las dos.

-Quiero que dejen en paz a mamá.

-A mí no me importa tu mamá.

-Eso ya lo sé, te acostaste con su hermana, estando comprometida con ella, y la embarazaste y ocultaste por quince años.

-La cosas no fueron así.

-Si lo fueron.

-No.

-Eres un cobarde que ni siquiera acepta lo que hizo.

-¡No soy ningún cobarde!

-¿Aceptas lo que hiciste?-pregunto.

-Sí, lo hice. Pero intento arreglar las cosas, contigo.

-Di la verdad y puedo pensarlo.

-No voy a decir nada, Naya.

-Entonces no hay más que hablar-le. Digo entrado a la cocina.

Mi abuela que estaba batiendo una mezcla me mira.

-¿Es que lo que hacen tú y tu amiga?-pregunta.

-Quiero que se sepa la verdad.

Ella me mira.

-¿Está mal?

-Sí que quieres es que todos sepan solo la verdad, no. Si haces lo mismo que ellas y quieres lastimarlas, sí.

Y es lo que quería cuando deje a Jared y le hice creer a maya que ella ganaba. Quería que le duela saber que no le creí.

Y también estoy haciendo sufrir a Jared.

Cuando salí de la cocina papá ya se había ido.

-¿Qué pasa?-me pregunta sienna.

-Soy como ellas.

-¿Qué?

-Yo quería que maya sufra cuando se enterara de que gano, por eso deje a Jared y también lo hago sufrir.

-Mírame, está bien que la quieras ver sufrir con todo lo que ellas les hicieron. Pero al final solo vamos a mostrar la verdad. ¿Qué hacemos, vamos con tu prima o cancelamos todo?
...
Ya nos metimos en esto y quiero que mi mamá pueda estar tranquila. Sé que cuando todos sepan la verdad ella no van a seguir. O al menos espero que sea así.

Miro a sienna que se esconde detrás de un árbol que no está nada lejos.

-¿Qué quieres?-pregunta maya al llegar.

-Pedirte que convenzas a tu mamá de que deje tranquila a la mía, y también que tú lo hagas.

-Eso no va a pasar.

-Tienen todo lo que querían.

-Falta verla destruida.

-Es horrible lo que dices.

-Es lo que se merece tu mamá y deja de insistir que no vamos a parar. Para todos somos las víctimas.

-¿Crees que pueden mentir por siempre?

-Solo tengo que fingir que me siento mal o derramar una cuantas lágrimas para que todos esos idiotas de la escuela me crean. Ellos solo creen en las versiones de las historias que yo le cuento.

Y nunca voy a decirles que fue mi mamá la que traiciono a su hermana. Nunca voy a decirle que yo siempre supe que él era mi papá también.

Bueno, lo acaba de decir.

Bueno, lo acaba de decir

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Desk love|Jared Cameron (#2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora